El agua más segura y controlada de Euskadi, en Barakaldo
El Ayuntamiento de Barakaldo ha asegurado que el agua que se consume en la localidad es “la más segura y controlada de Euskadi” y que el pantano de Oiola está siendo sometido “al más severo control” por parte del Departamento de Sanidad del Gobierno Vasco.
El Ayuntamiento de Barakaldo ordenó el domingo el cierre del pantano de Oiola y su desconexión de la red de abastecimiento al superarse, debido a las lluvias, el caudal establecido en el protocolo de actuación establecido por la aparición en varias ocasiones de isómeros de HCH (lindano).
Tras el cierre del pantano asociaciones ecologistas y vecinales de la localidad reclamaron el cierre permanente del embalse, por no poder garantizarse la sanidad y calidad del agua, y anunciaron que estudian la posibilidad de emprender acciones legales para pedir la desconexión del embalse.
La concejal de Sanidad y Medio Ambiente, Ana Belén Quijada, ha asegurado hoy que el cierre del pantano de Oiola es una medida preventiva enmarcada en un protocolo de actuación estricto y cuyo objetivo es evitar posibles situaciones de riesgo, pero que en ningún caso existe un riesgo real de contaminación.
Ha señalado que ese protocolo, realizado por recomendación de Sanidad del Gobierno Vasco, establece el cierre del pantano cuando el caudal supera determinado lÃmite, puesto que hubo una ocasión en 2008 en la que aparecieron isómeros de HCH en mÃnimas cantidades.
La edil ha afirmado que “no eran cantidades peligrosas” y que “se hizo un análisis de riesgos y se consideró que no habÃa peligro significativo para la salud porque las cantidades aparecidas estaban por debajo de los lÃmites considerados como seguros”.
El ayuntamiento señala que el protocolo establecido en 2008 ha convertido el agua que se consume en Barakaldo, y en varios municipios del entorno que también se abastecen de Oiola, en “el agua más segura y controlada de todo Euskadi”.
Ha explicado que el caudal del pantano, ubicado en el municipio de Trapagaran, se controla dÃa y noche, y que el lÃmite máximo de HCH o isómeros de lindane es de 20 nanogramos por litro, cuando el lÃmite máximo en el resto de pantanos vascos es de 100 nanogramos por litro.
Además, ha manifestado que el agua del pantano de Oiola “es, según los expertos, una de las de más calidad del territorio porque el pantano se abastece en su mayor parte de los manantiales naturales de los Montes de Triano”.
El ayuntamiento asegura que el agua que se consume en la localidad “es 100 por cien segura y cuenta con las máximas garantÃas sanitarias, tal y como confirman los sucesivos análisis que realiza Departamento de Sanidad del Gobierno Vasco, la institución competente en la materia”.
El pantano se cerró debido a que por el agua acumulada como consecuencia de las lluvias de los dÃas previos, se alcanzó un caudal de 63,36 litros por segundo en el arroyo de La Gorriga, superando el caudal de 50 litros por segundo que es lÃmite establecido en el procedimiento de uso del embalse de Oiola.
La concejal ha señalado que, tal y como marca el protocolo de actuación, es necesario esperar los resultados de dos muestras semanales positivas consecutivas para poder volver a abrir el pantano, por lo que el pantano estará al menos dos semanas cerrado.