Un blog para recoger mi experiencia vivida en Idomeni y otros campos de refugiados de Grecia durante la segunda quincena del mes de mayo de 2016. Un viaje provocado por la indignación y la vergüenza sentida por el trato que ofrece la Unión Europea a los refugiados sirios, iraquÃes y afganos en su mayorÃa, que huyen de la guerra y del terrorismo que golpea sus paÃses de origen. Sentà la necesidad de conocer la realidad de los refugiados de primera mano y contribuir con mi granito de arena para mejorar sus condiciones de vida.
Un viaje a una realidad lejana pero que cada vez está más cerca, que ya se encuentra entre nosotros y de cuya gravedad tenemos que tomar conciencia. Una realidad que no podemos obviar por mucho que levantemos muros que nos impidan verla. Otro gran fracaso de la Unión Europea que golpea de nuevo a la maltrecha Grecia. A sus polÃticas de austeridad para preservar los intereses de la banca privada acreedora, mermando de este modo la capacidad de crecimiento de las economÃas en crisis y agudizando asà su incapacidad para devolver la deuda contraÃda, tenemos que añadir la mezquina polÃtica de acogida de los refugiados y su reclusión en Grecia a raÃz del cierre de las fronteras. 60.000 refugiados más los que seguirán llegando por mar desde las costas de TurquÃa se hacinan en campos indignos. Indignos eran los campos que crecÃan de forma espontánea junto a la frontera con Macedonia (Idomeni, Hara, BP, EKO) con la esperanza de que en algún momento aquellas fronteras se reabriesen. Indignos son los campos militares habilitados para realojar a los refugiados. Si en los primeros, las condiciones fÃsicas de vida eran impropias de un paÃs de la UE, en los segundos, a unas condiciones fÃsicas que no son mejores, hay que añadir unas condiciones psÃquicas infinitamente peores. Si en los primeros las cometas volaban en el cielo como si reflejaran la esperanza de los refugiados por cumplir sus sueños y reagruparse con sus familiares en paÃses como Alemania, en los segundos, las techumbres de los polÃgonos que encierran las tiendas de campaña impiden el vuelo de las cometas, reflejo también de la falta de perspectivas de la gente que allà intenta vivir. Una situación a todas luces insostenible.
Por todo ello este blog, para recoger experiencias personales, llenas de pequeños detalles y de grandes aprendizajes. Pero también para trasladar mis opiniones sobre lo que otras voces nos cuentan, asà como sobre las polÃticas que en esta materia se van diseñando y aplicando y que de momento sólo sirven para defraudar las expectativas tanto de muchos ciudadanos de la UE como de aquellas personas refugiadas que veÃan en la UE un lugar en el mundo para rehacer sus vidas.
Jordi Campàs Velasco
Dibujo realizado por Inma Sánchez, voluntaria de Asociación de Ayuda a los Refugiados (AYRE)