“Puedo crear un bebé neandertal, si es que encuentro a una mujer dispuesta a ello’. No se trata de una broma, ni de un anuncio por palabras que se pasa de original. Es, simplemente, ciencia.

Son las palabras de uno de los genetistas más reconocidos a nivel mundial, el estadounidense George Church, experto en genética molecular e investigador de la Universidad de Harvard. Su gran sueño es resucitar a nuestro pariente más cercano, el Homo neardenthalensis, extinguido hace 33.000 años.

Según informa el Daily Telegraph, el profesor Church cree poder reconstruir el ADN de un neandertal , tal y como hicieron con los dinosauros en la archifamosa película ‘Parque Jurásico’. Sin embargo, Church necesita algo más que un laboratorio: necesita una mujer.

El científico norteamericano segura que para reconstruir el ADN le es suficiente con los restos óseos hallados en diferentes excavaciones.  “Lo único que me falta es una mujer con espíritu aventurero”, afirma.

Una vez reproducido el código genético, Church lo introduciría en una serie de células madre que serían posteriormente inyectadas en un embrión humano que estuviera en sus primeras fases de desarrollo.

Después de desarrollarse durante algunos días en un laboratorio, el embrión sería implantado en el útero de una mujer voluntaria. Se cree, aunque no está demostrado, que las células madre harían que el embrión híbrido de humano y neardental se decantara en su desarrollo por la línea genética marcada por el ADN neardental.

George Church, de 58 años,  es uno de los impulsores del Proyecto del Genoma Humano, gracias al cual se logró descifrar nuestro mapa de ADN.

Según este investigador de Harvard, ‘resucitar’ a los neardentales sería beneficioso para nuestra especie. Según declaró hace unos días al diario alemán Der Spiegel, “Los neardentales podrían pensar diferente a nosotros, podrían ser incluso más inteligentes que nosotros”.

Y es que Church es totalmente contrario a la teoría que presenta a los neardentales como brutos y retrasados. Para este genetista, la especie era inteligente, su cerebro era casi del tamaño del nuestro y fabricaban algunas herramientas.

Aunque clonar humanos es un delito en la mayoría de los países, alguno expertos en derecho aseguran que la propuesta del profesor Church es tan extraña que podría colarse por algún resquicio legal.