Mañana se cumplen 50 años desde la muerte de Buddy Holly, Big Bopper y Ritchie Valens. Estas tres jóvenes estrellas del rock and roll fallecieron en la madrugada del 3 de febrero de 1959 tras estrellarse la avioneta en la que volaban hacia Fargo .

Buddy Holly, Big Bopper, Ritchie Valens y el grupo vocal Dion and the Belmonts actuaron en el Surf Ballroom de Clear Lake, Iowa, el 2 de febrero de 1959. Este festival se celebró dentro del Winter Dance Party Tour, es decir, dentro de la gira de conciertos de invierno. Muchos se han preguntado desde aquel trágico día qué hacían grandes estrellas como Buddy Holly, Dion o Ritchie Valens actuando un lunes y en pleno invierno, en aquel lugar inhóspito del medio oeste americano. Sin duda en el caso de Buddy Holly la respuesta es fácil: necesitaba dinero. Se había casado recientemente y esperaba su primer hijo. Había abandonado a los Crickets y a su productor Norman Petty y estaba pasando por un difícil momento en el que necesitaba urgentemente actuar y ganar dinero. Además el concierto había sido organizado por un amigo suyo y por su colega Waylong Jennings que tocaba en su grupo de acompañamiento. Tras la insistencia de éste, Buddy Holly finalmente aceptó viajar hasta aquellos gélidos parajes.

Los músicos llegaron a Clear Lake agotados por el viaje. El autobús que les trajo hasta el Surf Ballroom era una vieja tartana que tuvo que parar varias veces por averías. Como el autobús no tenía calefacción, los músicos llegaron al concierto congelados; con sabañones en los dedos y en las orejas y con las gargantas destrozadas.

Al finalizar el concierto, Buddy Holly habló con los organizadores del tour y llegaron a un acuerdo para que no tuvieran que volver a coger aquel viejo autobús. Buddy Holly, Ritchie Valens y Big Bopper volarían hasta Fargo en una avioneta alquilada. Al despedirse del resto de sus compañeros y de los músicos que habían actuado aquella noche, Buddy Holly le comentó entre risas a Waylong Jennings: "¡ Ese autobús os va a dejar tirados en mitad de la nada!". Waylong Jennings le respondió bromeando: "¡ Ojalá os estrelléis!".

La avioneta en la que viajaban Buddy Holly, Ritchie Valens y Big Bopper se estrelló a la una de la madrugada. El joven que la pilotaba no pudo esquivar la enorme tormenta de nieve que los devoró. Los cuatro fallecieron en el acto. Aquel día se recuerda como el día en el que murió la música.