Antes de publicar su primer álbum de estudio Pretenders ya eran un fenómeno musical en Reino Unido. Los singles “Stop your sobbing”, “Kid” y “Brass in Pocket” auparon a la banda de Chrissie Hynde hasta el número uno de las listas británicas y el éxito de estos singles favoreció que el disco fuera superventas nada más llegar a las tiendas.
El álbum, editado en el sello Sire en enero de 1980, es uno de los mejores trabajos discográficos de la Nueva Ola.