La Policía Foral ha detenido en los últimos días a cuatro varones por agresiones físicas a sus parejas o a familiares y a dos más por quebrantar órdenes de alejamiento.
En Noáin, agentes de la Brigada Asistencial de la Policía Foral han detenido a un vecino de Barañáin de 27 años y con antecedentes relacionados, después de que la víctima denunciara agresiones y abusos continuos a los que era sometida por su pareja, solicitando una orden de protección.
En Estella/Lizarra ha sido detenido un vecino de la merindad de 35 años por un delito de malos tratos sobre su hija, menor de edad, tras la detención presentada por la abuela después de que su nieta le confesara los golpes sufridos.
En Altsasu/Alsasua una vecina de 41 años denunció a su marido por presuntas agresiones y amenazas proferidas delante de sus hijos y a lo largo del tiempo, por lo que una patrulla de dicha comisaría procedió a su detención.
Además en Viana, agentes de seguridad ciudadana de Estella han detenido a un vecino de 34 años después de que la víctima denunciara la agresión sufrida. El detenido llegó a amenazarla en presencia de la patrulla.
Por quebrantamiento ha sido detenido en Zizur Mayor un vecino de Berrrioplano de 29 años por no respetar una medida cautelar en vigor al alertar la familia de la víctima de su presencia en un vehículo que se dio a la fuga al ver a la patrulla. Tras ser interceptado fue denunciado administrativamente por etilometría positiva.
En un municipio de la Merindad de Olite, agentes de la comisaría de Tafalla han detenido a un joven de 26 años porque su expareja denunció que se había puesto en contacto con ella, saltándose así la medida de alejamiento y prohibición de comunicación en vigor que tenía impuesta por sentencia judicial.
En lo que va de año la Policía Foral ha practicado 72 detenciones por delitos relacionados con la violencia de género y doméstica.