David Fincher dirigía en 2008 ‘El curioso caso de Benjamin Button’, la historia de un hombre, al que interpretaba Brad Pitt, que nacía anciano e iba rejuveneciendo a medida que cumplía años. Enamorado de una mujer a la que daba vida Cate Blanchett, llegaba un momento que pese a la edad él era mucho más joven que su amada y que su propia hija. Algo parecido ocurre en ‘Adaline’, la nueva película de Andy Tennant.

‘Adaline’ cuenta la historia de una mujer, a la que interpreta Katherine Heighl, que sufre un accidente de coche y muere pero contra todo pronostico una luz la ilumina y la resucita. Esa resurrección trae consigo algunas condiciones: será inmortal y permanecerá siempre con el mismo aspecto que tenía cuando ocurrió el accidente y nunca envejecerá.

Con un destino que ella cree una condena, Adaline vive una vida solitaria y alejada de su familia, a la que no quiere ver morir ni sufrir, hasta que se cruza en su vida un hombre que puede romper esa inmortalidad y ella podrá envejecer junto a él.

Pero cuando parece que Adaline va reconduciendo su destino y encontrando la felicidad la hija que tuvo antes de su accidente la reclama. Su pequeña es una anciana de más de ochenta años que, en el ocaso de su vida, necesita a su lado a su madre. Esa hija tendrá el rostro de Angela Lansbury, la actriz británica nominada tres veces a los Oscar y recordada por su televisiva Jessica Fletcher de ‘Se ha escrito un crimen’.

‘Adeline’ cuenta con un guión de J Mills Goodloe y Sal Paskowitz y bajo la dirección de Andy Tennat comenzará su rodaje el próximo mes de abril.