Las obras de encauzamiento de los ríos Ibaizabal y Nervión en el tramo Urbi-Bengoetxe han duplicado su capacidad hidráulica y reducido el riesgo de inundaciones en Galdakao.
Los trabajos, que finalizarán en noviembre, tras 36 meses de ejecución, corresponden a la segunda fase del proyecto de encauzamiento de estos ríos y han sido acometidos por la Agencia Vasca del Agua-URA con un presupuesto de más de siete millones de euros.
Hasta la fecha, las zonas próximas a la confluencia de estos cauces se han visto anegadas con frecuencia durante las jornadas de intensas lluvias debido a que en su día se construyó junto a los cauces, encajonando el río y ocupando su llamada “llanura de inundación natural”, según ha informado URA en una nota.
Para evitar que se produzcan nuevas inundaciones, las obras han permitido encauzar el río Ibaizabal desde su confluencia con el Nervión hasta el azud de Bengoetxe, lo que ha posibilitado aumentar su capacidad hidráulica de 600 metros cúbicos por segundo a 1.200 metros cúbicos.
Además, han sido sustituidos los puentes de Bridgestone Firestone y Urbi por otros que favorecen el paso del agua en situaciones de crecida, se ha construido un nuevo azud de menor altura en Urbi y se han acometido trabajos de restauración ambiental con la revegetación de zonas afectadas, entre otras medidas.