El director general del Instituto de Mayores y Servicios Sociales (Imserso), César Antón, afirmó este lunes que si el Gobierno no hubiera reformado la Ley de Dependencia, como hizo la semana pasada con la aprobación de un decreto para tal fin, el modelo creado en la norma se habría “colapsado”.

“O se hacía el ahorro o el modelo se colapsaba”, declaró Antón en la apertura del curso ‘Un Estado de todos y para todos’ que se celebra en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP) de Santander.

El director del Imserso explicó que ahora que hay menos recursos, urgía una reforma del modelo de Dependencia que permitiera su funcionamiento, “toda vez que las comunidades autónomas habían trasladado la necesidad de una revisión para poder hacer frente a las políticas propias del Sistema de Dependencia”.

Según aseguró, tanto el Gobierno como las autonomías se han comprometido a dar prioridad de asistencia a los grandes dependientes, quienes, en consecuencia, entrarán en el sistema con mayor celeridad.

“Se persigue con la propuesta de mejora reducir en la medida de lo posible la lista de espera de alrededor de 300.000 dependientes sin prestación que se había heredado de la gestión anterior”, indicó Antón, que estuvo acompañado por el director general de Políticas de Apoyo para la Discapacidad, Ignacio Tremiño.

Finalmente, el director general del Imserso señaló también que la reforma de la Ley de Dependencia pretende equilibrar la atención familiar con la profesional, “incluso en el domicilio”.

¡FELIZ SEMANA, CORAZONES!

Mentxu