Odiaba con toda su alma esa canción. La consideraba pretenciosa, intrascendente, tontorrona, pegajosa. No soportaba que todo el mundo la tarareara estúpidamente por años que pasaran.
Odiaba con toda su alma esa canción, la que pedÃan a gritos, la que estaba a punto de interpretar de nuevo, con absurda cara de convencido, su puta canción.
Roberto Moso
Pingback: Radio Euskadi