Comictario. Otra triste y genial melonada de Daniel Clowes

Siempre igual, siempre distinto. Cuando uno se adentra en la lectura de un cómic de Daniel Clowes ya sabe a grandes rasgos lo que se va a encontrar: personajes solitarios, acomplejados, poseedores de grandes pensamientos totalmente huecos y que hacen frente como pueden a su triste existencia bajo una permanente sensación de fracaso. Sin embargo, esta receta, característica de las historias de Clowes, ofrece siempre, y ahí está la clave de la genialidad de este autor, ingredientes novedosos que hacen que el guiso, en su aparente uniformidad, sea diferente y exquisito.COMIC.El rayo mortal

Hace un año, en esta misma sección, elogiábamos las virtudes de otra obra de Clowes, la soberbia Mister Wonderful, y ahora, doce meses después de aquél alarde creativo, nos toca disfrutar de El rayo mortal, un trabajo anterior de Daniel Clowes que se publicó originalmente en 2004 en la mítica revista Eight Ball.

El rayo mortal, por supuesto, es una historia de seres marginados y solitarios. Su protagonista principal, Andy, es el típico adolescente pringado que las pasa canutas en el instituto, huérfano de padres y que vive en casa de su abuelo. Andy comparte su microcosmos de fracaso con Louie, otro chaval lleno de problemas y con sentimientos de rencor hacia el mundo que le rodea. En seguida, como siempre consigue Daniel Clowes, nos sumergimos en la angustia existencial de estos pobres perdedores y, también como siempre, nuestro genial estadounidense añade el giro inesperado que aumenta la enjundia del relato: un extraño superpoder que Andy logra gracias a su difunto padre y que se activa… ¡¡¡cuando el joven fuma su primer cigarro!!!

¿Absurdo? En manos de otro autor quizá, pero no cuando se trata de Daniel Clowes. La excusa del superpoder, junto a una extraña pistola que dispara un rayo fulminante, abre un amplio campo a la reflexión sobre la responsabilidad, el deber hacia los demás y el alcance real de algo que te convierte en único. Pero…, y aquí llega la genialidad “clowesiana”, Andy es tan poca cosa que ni siquiera el superpoder consigue transformarle en alguien especial. Sigue siendo un marginado solitario hasta el final de su patética vida.

Impresionante, como toda la obra de Daniel Clowes, este álbum, El rayo mortal, editado de forma impecable por Random House Mondadori.

Iñaki Calvo

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