Somos demasidos, el desastre total se acerca

Mirémoslo de este modo. Si descubriéramos mañana que hay un asteroide cuya trayectoria se cruzará con la Tierra y –dado que la Física es así de sencilla-pudiéramos calcular que la colisión se produciría el 3 de Junio de 2072, y supiéramos además que el impacto destruiría el 70 por ciento de  la vida en la Tierra, los gobiernos de todo el mundo pondrían en marcha una movilización planetaria sin precedentes.

Enrolarían a todos los científicos, ingenieros, personal universitario y empresarios: la mitad para investigar la forma de impedirlo, la otra mitad para buscar soluciones con el fin de que nuestra especie sobreviva y reconstruya lo destruido, si la primera opción no da resultado.

La situación en que nos encontramos (de superpoblación y acelerada escasez de recursos) es aproximadamente la misma, con la diferencia de que no hay ningún asteroide ni se puede precisar la fecha.

El problema somos nosotros.

Estamos capacitados para cambiar esta situación. Probablemente no recurriendo a la tecnología, pero es posible. Es posible si modificamos radicalmente nuestra conducta.

Pero no hay el menor indicio de que se esté modificando ni de que vaya a modificarse.

Creo que todo seguirá como hasta ahora.

Necesitamos con urgencia hacer algo radical –y digo  hacerlo realmente, con actos- para impedir una catástrofe planetaria. Pero creo que no haremos nada.

Creo que estamos jodidos”.

LIBRO.Diez mil millonesEsta es la conclusión a la que llega Stephen Emmot tras analizar los problemas que hemos creado por nuestro irracional uso de la energía y los recursos naturales, debido todo ello a nuestra codicia e inconsciencia. Cambio climático, pérdida de biodiversidad, escasez de agua y suelo fértil, superpoblación que nos aboca a los diez mil millones aludidos en el título… todo nos lleva a un túnel sin salida. Aunque haya solución -una solución no tecnológica que pasaría por un cambio radical de nuestra actitud- no cree que vayamos a adoptarla y por tanto pronostica el colapso de nuestra especie y de nuestro planeta.

Este ensayo es una obra sobre los problemas medioambientales, pero a la vez es un libro apocalíptico, un libro de terror como alguien escribió. Es un optimista informadísimo, un gran pesimista este científico inglés que dirige un amplio equipo interdisciplinar en Oxford. Por medio de lapidarias frases nos pinta un panorama desolador sobre nuestro futuro cercano.

Insisto, si quieren sentir el más profundo terror sin recurrir a la ficción, lean detenidamente esta obra. Si quieren dormir tranquilos no lean este breve trabajo de Stephen Emmot, Diez mil millones.

Jokin Aldazabal

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *