Lecturas de fin de semana. Sepetys colorea los sueños

La escritora estadounidense Ruta Sepetys (Detroit, 1967) se dio a conocer en muchos países con la publicación de su primera novela, Entre tonos de gris En ella contaba la historia de superación ante las adversidades de una adolescente en plena Segunda Guerra Mundial. La novela se inspiraba en las desventuras de su propio padre, emigrante lituano en Estados Unidos, que sufrió la represión estalinista sobre los lituanos en 1940, cuando él y miles de sus conciudadanos fueron traslados a campos de concentración en Siberia, a los terribles gulags donde bastantes encontraron la muerte.LIBRO.El color de los sueños

Ahora Sepetys regresa con una novela muy diferente, El color de los sueños, diferente en cuanto al paisaje y las circunstancias de los protagonistas principales. Y es que la acción nos lleva al Nueva Orleans de 1950 para contarnos, eso sí, otra historia de crecimiento y superación, la de una chica de diecisiete años, hija de una prostituta, que sale adelante gracias a su esfuerzo y a la ayuda de la madame del burdel donde su madre trabaja. La joven se llama Josie Moraine y su madre Louise es una bala perdida que no piensa en otra cosa que en ganar dinero y gastarlo al momento. La madame, Willie Woodley, se apiada de ella y la coloca en una librería de viejo junto a un viejo amigo.

Hay dos cosas que sobresalen en esta enternecedora novela. Por un lado el retrato de personajes que se hace, desde los principales, Josie y Willie, hasta los secundarios: los chicos que rondan a Josie, las prostitutas del burdel que forman como una familia e incluso la estirada clase alta que mira por encima del hombro a todos sus vecinos. Y por otro la vida descripción que se hace del Barrio Francés de Nueva Orleans, de sus casas de citas, sus viejos comercios, los tugurios donde se toca el blues, sus supersticiones, sus fiestas, sus procesiones…

Una novela muy documentada en el que la pasión por los libros y el conocimiento se convierte en el acicate para que una chica sin futuro, pueda labrarse un camino hacia la independencia personal y la libertad.

Enrique Martín

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