El Agujero Negro. Indestructible

Fue quemada, pisoteada, hecha añicos a martillazos, mil veces se anunció su definitiva decadencia y muerte.  Se levantaron contra ella intelectuales y analfabetos, alimentados siempre por la soberbia. Sotanas y uniformes militares han sido sus eternos enemigos. Sin embargo ahí sigue, indestructible. Como el duende que camina, siempre reaparece con bríos renovados brillante, trasparente.

Que tendrá esa jodida urna que no hay quien la elimine.

Roberto Moso

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *