El comictario. Tungsteno brasileño

Una semana más, dedicamos este espacio a uno de esos cómics destacados que se publicaron a finales del año pasado, que merece y mucho la pena y que todavía estamos a tiempo de recuperar. Se titula Tungsteno y es la obra más reciente del brasileño Marcello Quintanilha, la primera que se traduce al castellano y, tras haberla leído, uno no tiene más remedio que preguntarse por qué.

Tungsteno es una tela de araña perfectamente tejida, una intriga que transcurre en Brasil, en la ciudad de Salvador de Bahía, y que tiene cuatro protagonistas fundamentales: el señor Ney, un sargento retirado del ejército; Caju, un traficante de poca monta; Richard, un policía chulo y violento y Keira, su mujer. COMIC.TungstenoY el elemento que aglutina y hace confluir sus historias es un hecho en apariencia nimio, que se nos muestra como un incidente cotidiano en Salvador de Bahía: la pesca ilegal con explosivos a cargo de una pareja de delincuentes. Un delito menor, que no suele llamar la atención de la policía, pero que provoca la indignación del sargento retirado. El señor Ney, que en el momento de las explosiones está hablando de cosas banales con el joven Caju, le fuerza a denunciar lo que está ocurriendo, y al pequeño traficante no se le ocurre otra cosa para salir del paso que llamar a un policía que conoce. Y ese policía no es otro que Richard, del que es confidente y al que convence para que abandone el chiringuito playero donde se está tomando una copa a cambio de prometerle un soplo.

A partir de ahí, y como una máquina bien engrasada, los acontecimientos se desencadenan, y no por la aparición de escuadrones de la muerte o mafiosos sanguinarios, sino porque Marcello Quintanilha sabe narrar con mano maestra cuánto puede complicársele a un agente que va solo la detención de dos delincuentes de medio pelo, incluida una de las mejores peleas cuerpo a cuerpo que uno ha visto dibujada en un cómic. Y a todo esto hay que añadir las acciones paralelas que van salpicando la narración: el sufrimiento de la mujer de Richard, dispuesta a separarse de un marido que le engaña y no le presta atención; los agobios de Caju, el pequeño traficante que lucha por pasar desapercibido, y la frustración del señor Ney, que añora la autoridad y la disciplina del ejército. Protagonistas inolvidables de una historia con ritmo endiablado, que hace casi sudar con su lectura y que lleva por título Tungsteno, el metal también conocido como wolframio y que tiene el punto de fusión más alto de todos los metales.

Un cómic publicado por Ediciones La Cúpula y una sincera recomendación: no os lo perdáis.

Iñaki Calvo

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