El comictario. La obra de McCurry, por Morvan y Jung Gi Kim

El año pasado, al cumplirse el decimoquinto aniversario del atentado contra las Torres Gemelas de Nueva York, la editorial francesa Dupuis y la mítica agencia estadounidense Magnum editaron una obra conjunta sobre la tragedia del 11-S que mezclaba el cómic y la fotografía. Un espléndido álbum con guión de Jean David Morvan, dibujos del artista surcoreano Jung Gi Kim e instantáneas firmadas por el gran reportero gráfico Steve McCurry, que logró entrar en la “zona cero” poco después de caer las torres y autor de algunas de las mejores instantáneas sobre aquella horrenda fecha. Un contenido de lujo para un álbum imprescindible que acaba de publicar en castellano la editorial Diábolo.

Además de los atentados del 11 de Septiembre de 2001, eje central de la historia, el guionista Morvan hace un recorrido por la carrera profesional de Steve McCurry, auténtico icono del fotoperiodismo. Tras su primer trabajo en un medio local de Pensilvania, McCurry hizo la mochila en 1978 y eligió la India para su primer destino como fotógrafo freelance. Al año siguiente logra su primer gran éxito al entrar en Afganistán cuando el país estaba todavía en manos de los rebeldes y poco antes de la invasión soviética. Sus fotos fueron las primeras que se publicaron sobre el conflicto afgano, que cubrió a lo largo de 1980 para la revista Time y que le hizo ganar uno de los premios más importantes del fotoperiodismo, la Medalla de Oro Robert Capa. En ese momento Steve McCurry inicia su colaboración con la revista National Geographic, donde publica su instantánea más famosa, “la niña afgana“, ese inolvidable retrato de Sharbat Gula, la niña de bellísimos ojos verdes que fue declarada la mejor fotografía del año 1984 y que es, sin duda, una de las más conocidas de la historia.

En los años siguientes McCurry sigue cosechando premios, cubre la guerra Irán-Irak, ingresa en la agencia Magnum, recorre Filipinas y Camboya y fotografía sobre el terreno la Guerra del Golfo en Kuwait, Arabia Saudí e Irak. Un periplo apasionante del que somos testigos gracias a este álbum que une las fotos de McCurry y los magníficos dibujos de Jung Gi Kim. Una simbiosis perfecta que alcanza su punto culminante con los atentados del 11-S, y que recoge también otro hecho que marcó profundamente al gran fotógrafo: él estaba de visita en París el 13 de noviembre de 2015, el día en el que el Estado Islámico atacó la sala Bataclán y otros lugares de la capital gala causando la muerte de 130 personas.

Por encima de polémicas, como la denuncia de que McCurry retocó algunas de sus imágenes, algo prohibido en el fotoperiodismo, este hermoso libro es un homenaje a las víctimas de guerras y atentados y a la trayectoria de un auténtico titán de la fotografía. No os lo perdáis.

Iñaki Calvo

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