El comictario. Una hermana, del francés Bastien Vivès

La última década del cómic europeo ha estado marcada por el surgimiento de un autor que, en poco tiempo, se ha convertido en un clásico imprescindible. Se llama Bastien Vivès, nació en París hace 33 años y en 2009 recibió el premio al autor revelación en el festival de Angoulême por su primera gran obra, El gusto del cloro. La historia de un joven que va a la piscina a nadar por problemas de espalda y queda fascinado con una chica que entrena en el mismo lugar fue narrada de forma tan magistral por Bastien Vivès que, desde ese momento, cada nueva obra suya se espera con impaciencia.

Ha marcado hitos con títulos como Polina, genial aproximación al mundo de la danza clásica, ó Last Man, un increíble cóctel de intriga, acción y fantasía aderezado con un inequívoco toque de manga japonés. Se ha atrevido incluso con “una de romanos“, la interesante serie Por el Imperio. Incursiones en distintos géneros que no ocultan la gran especialidad de Bastien Vivès, que no es otra que contar historias de amor. Un amor, eso sí,  en el que la atracción se ve frenada por distintos y sutiles obstáculos. Es lo que ocurre con su última obra, titulada Una hermana y que nos sumerge en el calor de los amores adolescentes. Antoine tiene 13 años y un hermano pequeño.

Como todos los veranos, pasa las vacaciones con sus padres en la playa, pero en esta ocasión la casa tiene dos inquilinas inesperadas, Sylvie, una amiga de la familia que acaba de sufrir un aborto y su hija Heléne, una bella adolescente de 16 años. La estancia sólo dura una semana, pero Heléne irrumpe como un vendaval en la vida de Antoine con tabaco, las primeras borracheras y los primeros escarceos sexuales. Heléne domina y dirige la relación, es la que pone y quita los límites, pero sin maldad y a veces sin proponérselo. Todo fluye de forma bella y natural. A ratos, cuando la ocasión lo requiere, es la hermana que él nunca tuvo, y en otros momentos su guía perfecta para pasar de la niñez a la adolescencia y cambiar su visión de las cosas. Al terminar la lectura y quedarnos grabada la última y misteriosa viñeta nos queda clara una conclusión: Bastien Vivès lo ha logrado, ha vuelto a rizar el rizo con un magnífico engaño, vestido como una historia de seducción adolescente pero que oculta un rico muestrario de la psicología y el pensamiento en esa etapa clave de nuestra vida. No os perdáis Una hermana, la última obra de Bastien Vivès publicada en castellano, como siempre, por Diábolo Ediciones.

Iñaki Calvo

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