La primera mención del “príncipe azul” la encontramos un día entre los cuentos del poeta más popular del romanticismo rumano Mihai Eminescu (1850-1889): Aparece en relato de El príncipe de la lágrima, que abre este libro, Narraciones, junto a otros tres de los que dejó terminados en vida. El resto son recuperación de sus manuscritos y bocetos y en todos asoman los motivos románticos de apariciones demoníacas, amores imposibles, como el del monje Dan y la hermosa María, audaces y heroicas andanzas, envueltas en mágicos escenarios de cuento de hadas por los que se entrecruzan modestos personajes como Amalia o Dionis y otros más poderosos e inquietantes como Cezar e Ieromin.
Junto a Ion Creanga, autor de los Recuerdos de la infancia, el poeta y narrador romántico Mihai Eminescu es de las pocas referencias literarias que algunos tenemos de Rumanía. Ambos situados en la segunda mitad del XIX, una época de afirmación política y cultural frente a la larga dominación del imperio otomano, y ambos proyectados en las tradiciones de su país y defensores de una lengua propia, cultivaron el relato corto, que cargaron de bucolismo y ternura a la vez que de amor por la propia lengua y cultura. Con apenas treinta y tres años de vida, Eminescu dejó parte de su obra impresa y parte inédita e inconclusa y que la editorial granadina Traspiés ha reunido y traído al castellano de la mano del profesor granadino Enrique Nogueras en esta edición.
Seve Calleja