En una sartén grande se ponen tres cucharadas de aceite a calentar con los ajos sin pelar.
Cuando el aceite esté bien caliente se dora el solomillo que se habrá salpimentado. Una vez dorado, se baja el fuego y se sigue haciendo durante unos 8 minutos sin dejar de darle vueltas.
Mientras en un cazo se pone el vinagre de Jerez a calentar con el azúcar. Se tiene que reducir hasta ver que se queda denso. Se retira y se reserva.
Hecho el solomillo, se saca y se deja enfriar. El jugo de la cazuela se cuela, se mezcla con dos cucharadas de aceite y se reserva.
Una vez frÃo el solomillo (3 horas en el frigorÃfico), se corta en lonchas finas.
En una fuente o bandeja se echa el jugo del aceite y se ponen las lonchas de solomillo encima. Se termina rociando con la reducción de vinagre y un poco de rayadura de queso Idiazabal.
Se puede echar al solomillo un poquito de sal al gusto.
- 1 solomillo de cerdo
- 2 dientes de ajo
- 1 vaso de vinagre de Jerez
- 1 cucharada de azúcar
- 100 g. de queso Idiazabal
- Pimienta, aceite y sal