Se limpian los hongos y se trocean.

Se ponen a remojo las hojas de gelatina.

En un cazo se ponen tres cucharadas de mantequilla y se pocha la cebolla.

Una vez pochada se añaden los hongos y se hacen a fuego lento durante diez minutos.

Se calienta el caldo y se añaden las hojas de gelatina hasta que se deshagan. Se agrega el caldo a los hongos y se añade un poco de sal y pimienta. Se tritura todo y se pasa por el chino.

Se unta un molde con un poco de mantequilla o bien se cubre con film, se vierte el puré de hongos y se mete en la nevera para enfriarlo.

A la hora de servir se desmolda.

Si se quiere conservar tres o cuatro días se pone una capa finita de mantequilla sobre el paté.

• 500 g. de hongos
• 1 cebolleta
• 5 hojas de gelatina
• 1 vaso de caldo de verduras o de carne
• Mantequilla
• Sal y pimienta