Xabier Armendáriz y Xabier Rodríguez. Buceo entre pecios hundidos en las dos guerras mundiales

Xabier Armendáriz es historiador naval y Xabier Rodríguez marino mercante, ambos son instructores de buceo. Se han sumergido en las islas Orcadas al norte de Escocia. Estormes, en la bahía de Escapa Flow, es uno de los lugares más celebres del buceo técnico. En sus aguas naufragaron mas de setenta barcos alemanes e ingleses de la primera y segunda Guerra Mundial. Nuestros dos entrevistados, además de hábiles submarinistas, estudian con profundidad los pecios que visitan en sus inmersiones.

  

Uno de los lugares más celebres dentro del buceo técnico es Estormes, en la bahía Escapa Flow en las islas Orcadas al norte de Escocia. En sus fondos se hundieron más de setenta buques de las dos guerras mundiales. En la actualidad quedan media docena de ellos y más de veinte barcos mercantes.

Bucear en Espaca Flow es sumergirse en la historia. Los barcos se encuentran igual que cuando fueron hundidos, incluso algunos de los cañones todavía están cargados.

Las escenas son fantasmagóricas: barcos de 100 a 200 metros de eslora en un mar con poca visibilidad, corrientes y bajas temperaturas.

Xabier Armendáriz y Xabier Rodríguez han unidos sus dos grandes pasiones: la historia naval y el buceo. Sin duda sumergirse en Escapa Flow es una de sus grandes metas.

En primavera organizaron una expedición en la que fueron nueve submarinistas. La infraestructura fue bastante potente ya que debían de llevar todo el material desde Euskadi.

Cada inmersión la preparaban al detalle. Un trabajo en equipo bien organizado ya que se trata de un buceo técnico no exento de riesgo.

A una profundidad de 25 a 40 metros bucearon entre acorazados, destructores y patrulleras. Además del reto deportivo, esta la emoción de bucear en el silencio de las profundidades marinas entre barcos que marcaron una época.

Durante la I Guerra Mundial en la bahía de Escapa Flow estuvieron fondeados 71 barcos alemanes que fueron apresados por la marina britanica. Todos ellos fueron hundidos por los propios alemanes antes de entregarlos al enemigo.

En la II Guerra Mundial, esta base militar británica, también tuvo gran protagonismo. Vivió una historia de espionaje digna de las mejores película al uso.

Conversaremos con Xabier Armendáriz y Xabier Rodríguez en el magazine Bulervard a las 11,5 de la mañana.

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