Oscar López lleva quince años moviéndose por el mundo al encuentro de proyectos comunitarios con componente ecológico. Recorrió la India, vivió en pueblos ocupados de la geografía española, trabajo en un kibutz, convivió con los beduinos del Sinaí, los indios chortis de Honduras, en el interior del Amazonas y ahora reside en las montañas de Mérida en los Andes en donde imparte talleres de permacultura y rescata a la abeja melipona. 

Oscar López nació hace 34 años en Madrid. Después de mucho deambular por el mundo se ha instalado en los Andes de Venezuela. Sin ser muy consciente de ello ha viajado por el mundo al encuentro de formas alternativas de vida y siempre ha terminado viviendo en comunidad.

Comenzó en la India hace quince años. De regreso a España estuvo en pueblos ocupados como Aineto en el Pirineo oscense, la aldea ecológica de Amayuelas de Abajo en Palencia , en la Cooperativa Verde de Cádiz, en la granja escuela Ixuxu de Asturias. Se marcho a una comuna judía, un kibutz en el desierto de Negev en donde permaneció durante un año. Después estuvo con los beduinos del Sinaí, cera del mar Rojo, habitaban en una tienda de piel de camello.

Hace 12 años se fue a Honduras. Participo en un proyecto de construcción de casas de barro y alfabetización con los indios chortis. En aquella época no bajaba para nada del monte, asegura que “vivíamos peor que cabras”. Agarro dos fuertes disenterías.

De regreso busco un pueblo abandonado en Asturias sin resultado positivo. Su compañera y él optaron por volar a Brasil. Llegaron a la Amazonia. En el río Guayaperi montaron una hacienda ecológica que compraron a un italiano y a un argentino. Después de unos meses se fueron a Bolivia en donde les impresiono la riqueza cultural y la conservación de una gran variedad de semillas.

De vuelta en España buscaron financiación para un proyecto que posteriormente realizaron en la comunidad Abra 144 aldea bio regional amazónica. Estaba a tres horas por carretera de Manaos, en medio de la selva, muy aislados. Durante dos años construyeron una casa. Oscar padeció cuatro malarias y finalmente abandonaron el lugar.

Les hablaron de la montañas de Mérida en los Andes de Venezuela. Hacia allá fueron y Oscar se enamoro de la tierra, considera que tiene una energía especial. Su compañera Paloma volvió para España pero él se ha quedado y lleva ya cuatro años.

Le gusta la vida desprendida y la austeridad que le exige el día a día.

Contacto con el director del jardín botánico con el que ha organizado talleres medioambientales. Oscar ha escrito un manual practico: “Una aproximación a la permacultura”.

Ha trabajado en ocho fincas que están de 1500 hasta 2.050 metros .

Prepara un audiovisual para televisión y desarrolla un proyecto de rescate de la abeja melipona, una abeja criolla americana. Esta en peligro de extinción y es esencial en la polinización de árboles autóctonos. Es una especie muy mansa y generosa. Si desaparece peligra 1/3 de la selva americana porque ella es básica en la polarización.

Emitimos la entrevista con Oscar López  en Levando Anclas el domingo 21 de febrero 2010.

ekunoko@gmail.com