Pere Joan. Navegación por el río Paraná. El aprendizaje de la lentitud.

El dibujante de cómic Pero Joan ha escrito e ilustrado el libro “El aprendizaje de la lentitud. La expedición Paraná  Ra´anga”. Fue invitado a participar en una navegación que remontó los ríos  Paraná y el Paraguay  desde Buenos Aires hasta Asunción. Fueron en un viejo barco de palas a imitación de los que cruzan el Mississipi. Avanzaban a unos 7 u 8 kilómetros por hora. Pere asegura que: “remontar el río a la velocidad de un hombre que anda fue realmente el aprendizaje de la lentitud”.

 

Pere Joan es mallorquín, dibujante de cómic. Comenzó en la década de 1980 en la revista Cairo. Luego se hizo editor al crear la revista “Nosotros somos los muertos”. Sus dos últimas publicaciones son: “Nocilla experience” (Alfaguara) la adaptación al cómic de la novela del mismo título de Agustín Fernández Mayo y “El aprendizaje de la lentitud” (Glénat).

En marzo de 2010, durante 25 días, participó en un crucero cultural que reunió a un amplio equipo interdisciplinar para crear una nueva imagen del río Paraná dedicado al pasaje turístico. Fue el primer barco de pasajeros que se veía desde hace más de 30 años ya que en los últimos tiempos se ha dedicado exclusivamente como una hidrovía para el tráfico de mercancías.

Partieron desde Buenos Aires e hicieron transbordo en Rosario al barco, con cinco cubiertas, que les llevaría hasta la capital de Paraguay. Es una copia de los barcos clásicos de pala que se trasladan por el Mississipi. Su propietaria es Jenny Siu, una bióloga franco-tahitiana que reside desde hace años en Paraguay y monta cruceros por los manglares del país. Construyó un barco de madera sobre la estructura de un barco de guerra americano que naufragó. Al botarlo se hundió por el sobrepeso. Lo rehicieron. Lo volvieron a botar y una barcaza metálica a la deriva lo destrozó. Lo volvieron a reparar y hasta ahora navega sin problemas. La tripulación es paraguaya que hablan guaraní entre ellos.

En las orillas se observa el paisaje pampero. El estuario en donde desemboca el Paraná alcanza una amplitud de 50 kilómetros. Incluso se han encontrado esqueletos de ballena.

Algunas noches, pequeños saltamontes de apenas un centímetro infestan el barco y cubren el suelo y las luces de los pasillos exteriores que llevan a los camarotes. Se soluciona apagando las luces, excepto las de posición, convirtiéndose en un barco fantasma.

 A veces pasan horas sin ver una construcción humana y días sin conexión con el mundo exterior, no funcionan los móviles ni internet.

Pere Joan denomina a sus compañeros de pasaje como “expedicionistas” más que expedicionarios. Son treinta de nacionalidades argentina, paraguaya y española. Dominan diferentes disciplinas: un antropólogo llamado Mito, un jesuíta etnolingüista, Bartolomeu Meliá, que vivió hace unos 40 años entre tribus indígenas recién contactadas y que es una de las máximas autoridades en guaraní, un ruidólogo, Francisco López, que grababa los sonidos de los peces y un astrofísico, Alejandro Gangui, que les propona mirar al cielo a las noches sin contaminación lumínica, para ver las constelaciones.

En “El aprendizaje de la lentitud” se relata la historia del velero a vapor “Cosme Damián” que transportaba algodón cuando se hundió en 1943. A consecuencia de ello, se ha creado una isla en el río  pues se acumuló arena detrás de él y se formó una isla con su vegetación, su playa y su lago interior incluidos.

Pere Joan intervino en el programa de Radio Euskadi “La Casa de la Palabra” el lunes 14 de noviembre de 2011.

www.edicionesglenat.es

Puedes escuchar el programa:  https://www.eitb.eus/es/audios/detalle/776624/rafael-fuente-recursos-naturales-bolivia/

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