Antonio Pampliega. Afganistán a través de la mirada de sus gentes.

Antonio Pampliega  (Madrid, 1982) comenzó sus andanzas de reportero en enero de 2008 en Iraq, tenia 25 años. Desde entonces ha cubierto información en países como Líbano, Pakistán, Cuba, Egipto, Haití y en Afganistán ha estado en cuatro ocasiones. A partir de marzo de 2011 tiene piso en Kabul y amigos locales. De la relación  con los afganos y las historias que le han contado trata el libro de su autoría: “Afganistán. La vida más allá de la batalla”.

 

Antonio Pampliega escribe sobre la vida cotidiana en Afganistán en un periodo interminable de guerras. Desde la invasión rusa, la posterior guerra civil, la llegada de los talibanes y la actual situación sus habitantes no han tenido un respiro de paz. A través de la mirada de los afganos describe historias cargadas de humanidad, con ellas Antonio muestra el cariño que siente por este pueblo.

Cuando llega por primera vez a Kabul  le parece una ciudad sin color, tan solo predominan la gama de marrones. Es febrero, en pleno invierno y el frío aprieta. Los habitantes de Kabul no sonríen. Su guía fiel Mohamed Salem Wahdat el primer día le muestra una ciudad envuelta en el desastre, sin ocultar una sonrisa maliciosa le dice: “Han tenido que venir los americanos para que nos diésemos cuenta de que con los rusos vivíamos mejor”. Le señala que Afganistán padece un cáncer que se llama corrupción. Los miles de millones que los países están enviando a Afganistán están cayendo en manos codiciosas. Los únicos edificios que quedan en pie los construyeron los soviéticos.

Desde el primer momento Antonio es acogido con los brazos abiertos. Escribe: “Para los afganos, los invitados son más importantes que sus propios hijos. Son capaces de pasar hambre con tal de que te sientas a gusto en sus casa”.

La dieta de los afganos esta compuesta de pan, té y arroz. En ocasiones muy especiales pueden permitirse comprar carne, y si alguna vez lo hacen será de pollo, que es la más barata. En la mayoría de los hogares no se suele cenar porque no se lo pueden permitir, y si tienen hambre, deberán saciar su apetito con té y pan duro.

¿Cómo salir adelante en medio del fuego cruzado?. Cada capitulo es un relato que demuestra las argucias de la población para hacer mas viable el día a día.

 Cuando los talibanes se hicieron con el poder en 1996 prohibieron el canto, la música, volar cometas, acabarion con todos los pájaros para que los habitantes de Kabul no pudiesen disfrutar de su piar por las mañanas. Quemaron los libros que tuviesen impresos dibujos o fotografías de personas, prohibieron a las niñas acudir a las escuelas, vetaron cualquier materia escolar que no tuviese lazos con la religión, impidieron que las mujeres saliesen de casa sin burka y las obligaron a dejar de trabajar. El Ministerio de Asuntos Religiosos ordenó el cierre de todos los cines de Afganistán, así como la quema de la totalidad de las películas.

 Abdel Rabul es una institución en el mundo del celuloide en Kabul. Lleva ligado al cine desde hace más de treinta años. Un proyectista que hace las veces de taquillero, acomodador y vendedor de caramelos en el Aryub Cinema. Cuando entraron los talibanes escondió en dobles fondos unas trescientas películas y durante tres años resistió esperando tiempos mejores y, sobre todo, la caída del régimen. Se exilio en Peshawar (Pakistán), a su regreso abrió la sala con una enorme ilusión. El publico hacia largas colas y volvía a ser el cine más popular de la capital. Hoy en día El séptimo arte está en decadencia en Afganistán. El sueldo de las familias no les llega ni para sobrevivir, así que no se pueden permitir ningún lujo.

Otra de las historias es la del librero Asil Besad, su establecimiento es un punto de encuentro de turistas y afganos que tienen en común la pasión por la lectura y el amor a los libros. También fue usurpado por los talibanes y vuelto a renacer de las cenizas.

Antonio recoge muchos más testimonios, como el equipo nacional femenino de fútbol que desean jugar para desprenderse del burka. Uno de los capitulo le dedica a la periodista catalana Mónica Bernabé que reside en Kabul y lucha por la liberación de la mujer en este país.

Le entrevisté  a Antonio Pampliega en el programa de Radio Euskadi Levando Anclas el 27 de noviembre de 2011.

“Afganistán. La vida más allá de la batalla” publica  la editorial Plataforma.

www.plataformaeditorial.com

Puedes escuchar el programa:  https://www.eitb.eus/es/audios/detalle/785579/los-ciclo-turistas-alice-andoni-tienen-nino-bolivia/

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