Josep María Romero (Barcelona, 1956) ha dedicado una parte sustancial de su vida a las culturas de India y el Extremo Oriente. Tras dar la vuelta al mundo sin utilizar aviones ni mapas, se ha instalado en Chiang Mai, al norte de Tailandia, la tierra de la sonrisa donde la gente es dulce y suave. Publica el ensayo: “Tao las enseñanzas del sabio oculto”. Hace dos milenios y medio, los sabios ocultos de China sentaron los fundamentos del taoísmo. Josep María nos lo cuenta desde Tailandia.
El viajero y escritor catalán J. M. Romero ha residido en Pondicherry, Vientiane, Shangai y actualmente en Chiang Mai.
En su página www.jmromero.com podemos leer: “Cuando tenía dieciséis años, un amigo me prestó “Magos y místicos del Tíbet”, de Alexandra David-Neel. Me fascinó. Empecé a devorar libros de orientalismo y viajes: Krishnamurti, Alan Watts, Tao Te Ching, Herzog, Harrer, Heyerdahl.”
En verano de 1974, con 17 años, emprendió su primer viaje en solitario. Fue en autostop hasta París y luego a Suiza. Algunos le invitaron a quedarse en casa o a comer, o incluso le dieron dinero. Dormía en estaciones de tren, en áreas de servicio o, sencillamente, al raso. Parece ser que Kerouac ejercía una intensa influencia en él.
Meses más tarde se instaló en Cardiff durante un año. En febrero de 1976 reunió suficiente dinero como para financiarse su primera gran aventura. Aterrizó en Estambul y a partir de ahí siguió la ruta hippy hasta India pasando por Teherán, Quetta, Kandahar, Kabul y Peshawar.
En los años sucesivos el viaje se transformó en el eje de su vida. Se ganaba el sustento como profesor de inglés mientras cursaba estudios de Filología Inglesa y publicaba libros y artículos. Su primer libro fue la Guía Altair de la India que salió a la calle en 1988. Luego le siguieron un par de ellos sobre cocina internacional exótica.
En el invierno de 1996-1997, surgió la oportunidad de embarcarse en un velero hacia la Antártida. Era el “Rael”, una goleta de 17 metros de eslora, cuyo patrón era Ramón Alos. Zarparon de Port Balís el 13 de octubre de 1996 rumbo hacia la Antártida. Josep María nunca antes había pisado un velero. La experiencia la narra en “El jardín de hielo. El primer velero español en la Antártida” (Juventud, 2000). Por aquel entonces entrevisté al autor para Radio Euskadi.
A finales de 2001 se tomó un año sabático para dar la vuelta al mundo durante 14 meses que dio como resultado el libro “Siempre hacia el oeste” (Altair, 2009). No utilizó aviones. Cruzó el Atlántico y el Pacífico en cargueros.
Con la vuelta al mundo cerró una época de viajes. A partir de esemomento le apetecían estancias prolongadas en diferentes sitios de Asia. Pasó temporadas en Pondicherry, Vientiane, Yagshuo, Shangai y, actualmente, en Chiang Mai.
A esta población del norte de Tailandia llegó en julio de 2012. En este momento le pareció el lugar más interesante del mundo. Siempre ha querido vivir en oriente y este es un sitio discreto, la frontera de Birmania con Laos, China e India no están muy lejos. Hay librerías y la gente es muy dulce y suave. No es caro. Se siente un privilegiado.
Le interesan las minorías tribales y suele hacer excursiones por las montañas. Se siente muy a gusto entre ellos. Recientemente le han invitado al festival del “columpio”del pueblo aka. A la entrada de cada aldea de esta etnia tienen un columpio.
J.M. Romero ha bebido de la filosofía del Tao. En 2010 pasó la mayor parte del año en China (Sanghai y Yanshuo) en donde aprovechó para escribir “Tao las enseñanzas del sabio oculto” (Kairos, 2013). Estudió la historia y la religión de los chinos. Desde esos escenarios, la filosofía de los viejos taoístas resultó más comprensible y luminosa.
J.M. Romero nos habló desde Chiang Mai para el programa de Radio Euskadi “Levando Anclas” emitido el 15 de diciembre de 2013.
Puedes escuchar el audio del programa:
https://www.eitb.eus/es/audios/detalle/1838356/andoni-lubaki-reportero-siria/
