Ramón Portilla (Madrid, 1958) es un montañero y escalador de referencia. Empezó a escalar con 15 años. Con 17 años vivió la primera tragedia en la montaña, con 25 años, en 1982, realizo la primera al Himalaya y corto amarras con la seguridad social y la rutina. Su afición a los libros – sobre todo de alpinismo, viajes y aventuras – es tan antigua como la pasión a las montañas. Son muchos años de atesorar volúmenes y escalando montañas. En 40 años ha vagabundeado por algunas de las más maravillosas montañas, ahora las recopila en un libro donde repasa la historia de sus ascensiones y cuenta su experiencia en cada una de ellas. Las ha ordenado en Alpes, África, Andes, Himalaya-Karakorum-Thienn Shan.

Ramón Portilla se ha convertido en un experimentadísimo montañero por las diversas cordilleras del mundo y un hombre documentado en la historia de las escaladas y ascensiones. Publica “Historias de bellas montañas” donde brinda un homenaje personal a las montañas, a los alpinistas pioneros que enseñaron el camino hacia la cumbre. Además relata hechos autobiográficos en cada una de las montañas.

Hubo dos libros que le marcaron  en la juventud. Uno es “Los tres últimos problemas de los Alpes”(Juventud, 1954) escrito por el alemán Anderl Heckmair; y el otro “Estrellas y borrascas” (1954) de Gaston Rébuffat.  Estas lecturas inspiraron a Ramón Portilla el proyecto de hacer 6 caras norte en los Alpes: Eiger, Cervino, el espolón Walker a las Grandes Jorases, el Dru, la Cima Grande di Lavaredo y el Piz Badile.

Tenía 17 años cuando hizo su primer viaje a los Alpes. Era el verano de 1976. Años más tarde tuvo un accidente en el Espolón Walker. Se agarro a una enorme roca y se le vino encima, pensó que se mataba, voló 20 metros. Tuvo que pasar la noche en la pared mal herido. Recuerda: “Hice del dolor mi aliado pensando que mientras hubiera dolor había vida. También me ayudaba a no dormirme, con el consiguiente peligro de una “muerte dulce” desangrando, el marcarme metas temporales que ir superando mientras hacíamos señales de socorro con la linterna en dirección al efigio de Leschaux, apenas visible desde donde estábamos, con la esperanza de que alguien lo viese y diese la voz de alarma.”

En el apartado de África hace mención al monte Kenia, la segunda cumbre más elevada del continente que Ramón considera más atractivo que el Kilimanjaro. Por aquel entonces era un asiduo especialista en el programa de TVE “Al filo de lo imposible”. Vivió múltiples y divertidas aventuras junto a Juanjo San Sebastián y el piragüista Antxon Arza. La primera noche de aproximación empezó a sentirse muy mal. Días después ingreso en un hospital de Nairobi con 40 grados de fiebre. Tardo un año en recuperarse. Parece ser que fueron unas amebas enquistadas que, probablemente, había cogido en la anterior expedición a Nepal.

En el apartado de Andes describe la belleza del Alpamayo, en la Cordillera Blanca de Perú.

Ramón ha subido a cimas de todos los países andinos menos Colombia.

Siempre había querido ir a la Patagonia pues le resultaba atractivo hasta el nombre. Fue por primera vez en 1986. Escribe: “La Patagonia real superó el mejo de mis sueños. El Himalaya es asombroso pero, para m i, intimida de puro desmesurado. Patagonia, en cambio, es igual de rica en diversidad de paisajes pero mucho más abarcable. Lo primero que me fascino fueron sus cielos. Puedes estar horas mirándolos mientras no cesan de cambiar su colores o las caprichosas formas que el viento talla en las nubes que lo surcan.”

Ramón Portilla se para hacer relación de historias alrededor del Fitz Roy, Cerro Torre y la Aguja Poincenot.

“Historia de bellas montañas” edita Desnivel.

Emitimos la entrevista con Ramón Portilla en el programa de Radio Euskadi “La Casa de la Palabra” el 8 de mayo de 2015. Próximamente seguiremos con un nuevo capítulo en el que nos hablara de las más bellas montañas asiáticas.

Puedes escuchar el audio del programa: http://www.eitb.tv/es/radio/radio-euskadi/levando-anclas/3446172/4059288/ramon-portilla-historia-de-bellas-montanas-islandia-corea-del-sur/