Rocío Gandarias navega en el “Cirrus” hasta Nueva Zelanda y tiene 2 niños.

Rocío Gandarias nos relata como navegó de Inglaterra hasta Nueva Zelanda en el velero “Cirrus” con su compañero Gaspar Van Hollembeke. Arribaron a la bahía Harauki en  Auckland y allí se quedaron. Llevan 4 años, encontraron trabajo y les han nacido dos niños. Rocío nos visitó en el estudio. Transcribo un extracto de la conversación que mantuvimos. Se emitió el 8 de enero 2022, en el último programa de “Levando anclas” en Radio Euskadi.

Rocío Gandarias y Gaspar Van Hollembeke han estudiado arquitectura naval en Inglaterra. Una vez terminada la carrera se compraron el velero “Cirrus” y emprendieron una circunvalación al globo terráqueo que de momento los ha llevado hasta Nueva Zelanda.

Partieron de Southampton (Inglaterra), pararon un tiempo en Getxo, para luego ir a Canarias y de la isla de El Hierro cruzaron el océano Atlántico hasta las Antillas francesas. Pasaron el canal de Panamá adentrándose en el océano Pacifico rumbo a Nueva Zelanda.

¿La idea originaria era llegar hasta Nueva Zelanda y asentaros durante un tiempo?

Nuestro objetivo era arribar en Nueva Zelanda, pasar un par de años y continuar navegando, pero de momento aquí nos quedamos.

Una vez que terminasteis los estudios de arquitectura naval comprasteis el “Cirrus” con vuestros ahorros. Ya habéis cruzado dos océanos y por las entrevistas que os ido haciendo en el transcurso de la aventura parece que todo ha ido muy bien.

La verdad es que no hemos tenido muchos contratiempos. El barco es bastante pequeño y se suele decir que “barco pequeño, problema pequeño”. Estoy de acuerdo 100% con esta frase.

También tendrá que ver que sois arquitectos navales y conocéis bien el barco.

¿Os habéis hecho buenos marinos?

Ser arquitectos navales fue importante, pero creo que nos hicimos buenos marinos durante el viaje.

Conocemos bien el “Cirrus” porque lo vaciamos entero y lo preparamos en Getxo con la ayuda de mi padre Gonzalo Gandarias que se dedica a la construcción y preparación de barcos a vela. Aprendimos cada día más según navegábamos. Al final, Gaspar y yo no teníamos ni que hablarnos cuando hacíamos las maniobras.

¿Cómo fue la travesía de vuestro primer océano, el Atlántico, de El Hierro a María Galante en las Antillas francesas?

En esta travesía vinieron dos amigos, así que fuimos cuatro. Tuvimos bastante viento, como 25 nudos de popa casi todos los días. Nos empujaban los alisios y fuimos muy rápidos. Nos fuimos acostumbrando al barco y todo fue muy bien.

Llegasteis hasta las Antillas, Cartagena de Indias (Colombia) y en Kuna Yala (Panamá) donde dicen que es un paraíso.

Es impresionante. Son 365 islas y también les pertenece algo de territorio continental. El paisaje es precioso y es interesante porque sus habitantes siguen con las antiguas tradiciones.

Después de Kuna Yala, en abril de 2018 pasasteis el canal de Panamá con la intención de cruzar el Pacífico, el mayor de los océanos. ¿Se queda pequeño en comparación con el Atlántico?

En el Pacifico nos quedamos solos Gaspar y yo. Tardamos 30 días desde Ciudad de Panamá hasta la isla de Nuku Hiva, la más grande de las islas de las Marquesas en la Polinesia Francesa. Cuando llegamos, por un lado, nos hizo ilusión, pero por el otro deseábamos seguir navegando. Tuvimos tan buena travesía que no nos importaba pisar tierra.

¡Ah, sí! Pero fue un mes sin ver tierra.

Parece mentira, pero esa fue la realidad. No nos hubiera importando navegar un poco más.

Antes de llegar a las Marquesas chocasteis con una ballena ¿Qué sucedió?

Justamente yo llevaba el timón. Navegábamos bastante rápido y de repente ¡pum, pum, pum! Exclame: “¡Buah! Salió Gaspar del camarote diciendo: “¡qué ha pasado!”. En ese momento observamos a una ballena que se iba. Creo que no le hicimos daño y ella tampoco al barco porque es fuerte de aluminio.

Puedes escuchar el audio del programa: https://www.eitb.eus/eitbpodkast/bizitza/bidaiak-abentura/levando-anclas/audios/detalle/8892952/podcas-audio–la-ruta-de-mogoles-nueva-zelanda-a-vela-china-de-mao-groenlandia-eitb-levando-anclas/

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *