Una buena ducha

No es lo mismo darse una ducha a todo correr pensando en todo lo que tenemos por hacer, que sentir el momento y centrarnos en lo que sentimos. Verónica nos propone esta buena ducha.

INGREDIENTES: Una persona mínimo, velas aromáticas, música relajante, ducha, gel, champú, toalla o albornoz, leche o aceite hidratante.

PREPARACIÓN:
· Colocar velas en el baño, si son aromáticas, mejor.
· Poner música relajante.
· Elegir el gel, el champú y la leche hidratante o aceites.
· Desnudarse.
· Abrir el grifo de la ducha, poner al gusto la temperatura del agua.
· Meterse en la ducha.
· Sentir como el agua recorre nuestro cuerpo.
· Masajear la cabeza con champú, sintiendo como nuestros propios dedos nos relajan.
· Masajear el cuerpo con gel, sintiéndolo.
· Aclarar el cuerpo mientras sentimos la presión del agua en nuestro cuerpo.
· Podemos coger el mango de la ducha y estimular, al gusto, diferentes zonas de nuestro cuerpo.
· Podemos alternar la estimulación del chorro del agua con la estimulación de las manos.

· Cuando se crea conveniente, salir de la ducha o bañera.
· Secarse una toalla o albornoz con detenimiento.
· Aplicar aceite o leche hidratante en todo el cuerpo, sintiéndolo, masajeándolo (en este último punto nos podemos extender todo lo que queramos puesto que el grifo ya está cerrado)
· Después, si queremos, nos podemos vestir.

TIEMPO PREPARACIÓN: Unos cinco minutos para los preparativos (velas, música, gel…) y duración ilimitada cuando estimulemos y masajeemos nuestro cuerpo.

GRADO DE DIFICULTAD: Facilísimo.
Para los complementos podemos contar con Bitxigorria.