Os ofrecemos hoy un breve artículo, directo y pedagógico, de la psicóloga Cristina Couto, colaboradora de STOP ACCIDENTES PAÍS VASCO que reflexiona sobre nuestra sociedad, que no se prepara para aceptar la muerte.
Stop Accidentes atiende a los afectados y familiares en la sede de Stop Accidentes País Vasco de lunes a viernes (10 a 14h.) en la Pinondo Etxea de Durango.
También se atiende en el teléfono 946 033 000.
El correo electrónico es psicologa@stopaccidentes.org
MUERTE Y DUELO TRAS UN ACCIDENTE. Cristina Couto.
Desgraciadamente es bastante común que lleguen a Stop Accidentes personas que han perdido a un familiar (generalmente una pareja o un hijo) en un accidente de tráfico. Esto, entendemos, es un hecho traumático para cualquiera, por lo que habrá que afrontar un periodo de suma tristeza y duelo por la persona que nos ha dejado tan drásticamente. ¿Pero cuánto ha de durar este proceso?
Es muy habitual oír quejas de los usuarios refiriéndose a familiares y personas cercanas que les están acompañando en estos momentos tan duros. Escuchan comentarios como “¿pero todavía sigues con eso?, si ya ha pasado mucho tiempo, intenta hacer una vida normal”. El sentimiento para la persona que ha perdido a un ser querido es de incomprensión y de falta de respeto hacia un proceso que tiende a ser largo (refiriéndonos a años), e individual, cada persona lo llevará de una manera diferente.
Y es que en la sociedad en la que vivimos actualmente, la muerte es todavía un tema tabú y para el que, curiosamente, no estamos preparados. No se habla a los niños de ella, y si se hace, se les cuenta historias poco realistas, creyendo que así les causaremos menos dolor. Entre los adultos no se menciona el tema, teniendo todavía la creencia de que si se habla de la muerte, se tienta a ella.
Es importante hablar de las emociones, aceptarlas como algo positivo y adaptativo, incluso el dolor y tristeza que estos momentos se puedan sentir. Ser un modelo para los más pequeños, que por sus características evolutivas, no siempre comprenden que la muerte es algo irreversible, universal y permanente.
El objetivo de los que estamos alrededor apoyando a estas personas en duelo, es que se sientan acompañadas y apoyadas en su día a día, comprendiendo que su visión del mundo y del entorno ya nunca volverá a ser la misma, ya que les han arrebatado repentinamente a una persona muy querida, y en muchas ocasiones de una manera injusta, como por ejemplo por la imprudencia de un conductor ebrio o cuya resolución no ha sido satisfactoria, como en los casos en que se declara la inocencia de la persona responsable de un siniestro.
Es cierto que no se habla de la muerte, hay aún mucho tabú, “lagarto, lagarto”… En mi casa no se hablaba y ahora no me es nada fácil: ¿cómo le explico ahora yo ausencias a mi hijo?
Totalemente de acuerdo. Todavia gran parte de la sociedad siente que hablar de la muerte significa atraerla. Gran error.
Cuantas más herramientas tengamos para estar al lado del doliente más validos seremos para acompañarle en ese duro camino, y para eso hay que hablar.
@Carme
Siempre habrá que tener en cuenta la edad de los niños y su nivel intelectual. Cuando son muy pequeños (Educación Infantil) o tienen discapacidad intelectual se pueden usar muñecos, marionetas, cuentos… Cuando ya son más capaces de entender el concepto de muerte, se pueden aprovechar los momentos en los que ellos saquen el tema. Tendremos que mantener el tipo con sus preguntas y responderlas de modo realista, a pesar de que nosotros también estemos pasando por un momento de gran dolor.
Gracias por los consejos Cristina, Creo que son de un gran sentido común y que me ayudarán.
Difícilmente se puede iniciar un proceso de duelo en condiciones cuando se ha de estar pendiente de la situación judicial.
No somos las víctimas y familiares quienes tenemos que investigar lo sucedido….Eso es algo que olvida muy frecuentemente el Sistema Judicial, incrementando el dolor ante la indiferencia hacia las víctimas.