Las estadísticas elaboradas en los seis últimos años por la Dirección de Tráfico del Gobierno vasco indican que los viernes por la tarde se incrementan los accidentes de tráfico.
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Los viernes es cuando Ertzaintza y Policías Municipales atienden el mayor número de siniestros con heridos en las vías vascas.En el 2011, algo más de la mitad del total de estos sucesos (54,5%) se originaron sin la presencia de factores climatológicos reseñables y la mayoría de éstos (3.184) afortunadamente sin víctimas. En otros 1.394 hubo heridos e incluso fallecidos; de las sesenta personas que perdieron la vida en accidentes de tráfico en 2011, en 42 casos la carretera se encontraba seca y limpia, según consta en los atestados abiertos por las patrullas. En esos mismos informes también queda registrado que treinta y ocho personas fallecieron en horario diurno. Lo que llama la atención, además de alertarnos de unas cifras que debemos intentar reducir a cero, es que la inmensa mayoría de los sucesos en los que se contabilizan víctimas en ese mismo intervalo de años están fechados en viernes y casi siempre a las seis de la tarde. Los balances elaborados por la Dirección de Tráfico del Gobierno vasco correspondientes a 2006, 2007, 2008, 2009 y 2010 comparten esa pauta.
En el 2010 hubo 1.608 accidentes con víctimas en los que murieron 36 personas, treinta y tres durante el día y la mayoría en viernes. En 2009 se contabilizaron 1.864 siniestros con características similares y treinta personas murieron en las vías en días en los que no llovía o nevaba.Si miramos un poco más atrás, en el 2008, la Dirección de Tráfico atendió 1.896 accidentes con víctimas (cincuenta y seis perdieron la vida) y en 2007, doce personas murieron en la carretera en horas diurnas. En 2006 hubo más de mil setecientos accidentes en horario diurno con catorce fallecidos y en 2005, bajo el epígrafe de Buen tiempo constan sesenta y una personas en 2.411 siniestros.
En palabras de Luis Murguía en el diario Deia, experto en temas de movilidad y vicepresidente del Real Automóvil Club Vasco-Navarro, el hecho de que los siniestros se concentren en viernes y principalmente en ese horario obedece a que coinciden con las salidas del trabajo, de fin de semana y, en ocasiones, con viajes a puntos vacacionales. Aunque se trata de hipótesis sin analizar a fondo, parece que los conductores nos envalentonamos en los días de buen tiempo y no ponemos tanta atención al volante. También hay que sumar el cansancio, incluso la fatiga, y las prisas como otro elemento crucial para entender el elevado número de accidentes que se concentran en el final de la semana laboral.
Las salidas de calzada, los choques contra obstáculos o el vuelco del vehículo son los incidentes más habituales. Otros datos que se extraen de las estadísticas de la Dirección general de Tráfico son que los accidentes mortales más frecuentes en zona interurbana se producen en las salidas de la calzada y los atropellos. En cuanto a las causas más comunes hay dos que se repiten: la infracción a las normas de circulación y la velocidad inadecuada, si bien también se destacan las distracciones al volante. En el conjunto de los siniestros, los que se saldan con y sin personas heridas, el grueso está formado por los accidentes denominados por alcance, muy por encima de los frontales aunque estos últimos son los más graves.
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