Desde que se retiraron Laurent Jalabert y Richard Virenque, y con la excepción de Christophe Moreau que a punto estuvo de pisar el podium del Tour de Francia en el 2000, ningún ciclista galo se ha asomado el balcón del podium del Tour, y casi, ni de otra carrera importante.
Pero, pese a que les falte un lÃder con garantÃas, el ciclismo francés sigue manteniendo la identidad de tener corredores extraordinariamente luchadores que se desenvuelven a la perfección en recorridos exigentes. El mejor de todos ellos es seguramente Sylvain Chavanel, pero no le van a la zaga corredores como Thomas Voeckler, David Moncoutie, Pierric Fedrigo, Sandy Casar o el propio Anthony Roux, ganador en Talavera de la Reina.
¿Pero es suficiente para todo un ciclismo francés? ¿Por qué se encuentra en esa situación?