21 abril
Alfredo sigue mal y está claro que a 6.400 metros no va a mejorar. Mañana se baja al Campo base Chino a descansar un par de dÃas para ver si mejora.  Pedro le va a acompañar, yo me quedo. Necesito una mayor aclimatación ya que voy sin oxÃgeno y además también voy más retrasado que ellos en lo de llevar mi material personal para arriba al no tener porteador. Mañana intentaré subir unas cuantas cosas al C1 y quedarme allà a dormir. Me duele no acompañar a Alfredo y me espanta dormir  sólo en una tienda a 7.100 metros. Son decisiones duras y difÃciles. Nadie dijo que esto fuera fácil.  Todo el dÃa de ayer y toda la noche ha soplado un viento horroroso. Imposible dormir. Hoy amanece igual, me china bastante.
Por otra parte hoy hemos tenido la puja, curiosa ceremonia en la que un lama busca la bendición de la montaña, o de los dioses que quizás sea lo mismo. Me recuerda al dÃa de muertos en México. Mientras recita su interminable letanÃa el lama arroja comida: arroz, chocolatinas, y bebida: té whisky, cerveza. Mientras los sherpas levantan las banderas de oración. Finalmente todos nos comemos y bebemos lo que hay, incluido el whisky. Nos cuelgan una protección al cuello y ponemos lo que queremos que nos bendigan. Yo pongo las botas, que son las que me han de llevar hasta donde llegue y proteger mis deditos.
Todo ello dura unas dos horas. Espero que nos proteja, porque con el viento que hacÃa casi nos mata de frÃo.