El homenaje será en Chirgua: capital, Bedia

Los Meabe, los Zenarruzabeitia, los Marzana, Kontxa, tío Vicente, Begoña, Javier, Isidor, Imanol, Iñaki, los primos, las primas, los novios, los amigos, los cazadores. La lista podría ser muy larga, porque los recuerdo a todos. Como eran. Y eran estupendos. Casi todos eran arratianos y, puestos a matizar, de Bedia.

Entre los pegados había algún elorriano o de Axpe o de Apata, pero la colonia, aquella colonia de euskeldunes trasplantados con todo y amama al valle de Chirgua, cerca de Carabobo, el campo donde las tropas realistas españolas recibieron la derrota final, eran básicamente y a todos los efectos baserritarras arratianos, dispuestos a probar fortuna y mejor vida en América.

  

Los animaron a repoblar una tierra que se prometió fácil y fértil y se encontraron con un entorno hostil, una selva que había que domeñar, una vida que había que aprender. Y aprendieron. ¡Vaya que si aprendieron!

La primera vez que viajé a Chirgua debió ser en febrero de 1967, a cantar Santa Ageda, a recoger dinero para los presos, de la mano de José Mari Uzkanga, que ya había echado la red para entonces en la comuna y había pescado a Bakartxu. Luego, me hice, nos hicimos como de la familia, sobre todo por Kontxa, que nos adoptó, que debió apiadarse de aquellos recién casados que éramos, lejos de nuestras casas, de nuestras familias. Kontxa ya estaba bastante sorda entonces, pero qué oído más fino tenía para captar las necesidades de los demás.

Nuestro viaje de novios, es un decir, fue a Chirgua, donde había muchos naranjos y otros frutales, pero donde sobre todo había entonces gallinas. Y mi mujer era, y es, asmática, y reaccionó como es fácil de imaginar. Las atenciones se multiplicaron. Eso nos acabó de incorporar definitivamente a la gran familia que formaban Meabes, Zenarruzabeitias, Marzanas. También había un Jaio, veterinario, que atendía el ganado de una estancia que tenía ahí mismo el mismísimo Rockefeller.

Cuando conocí la colonia ya se había muerto la amama, a la que enterrraron en Chirgua, como cantó el cuento de Martín Ugalde con el que ganó el concurso del diario El Nacional de Caracas. Pronto murió también el primer Meabe, Iñaki, esposo de Kontxa, y lo velamos y lo lloramos en Caracas, cerca de la Plaza de Venezuela.

En Chirgua se criaban animales, se plantaban naranjos, se sembraba papa y se hablaba euskera arratiano. En aquella colonia de casitas bajas cubiertas por bouganvillas y rodeadas de geranios, vivían media docena de familias completas, en la que no faltaba el mutil zahar, tíovicente, que se manejaba en un mal español absolutamente suficiente para sus necesidades sociales.

Algunos de los hijos e hijas empezaron a irse a Caracas y a Valencia, y algunos de los nietos y nietas asomaron pronto a la Universidad. Pero todos recalaban por la colonia a cada momento, a cada conmemoración. Todos encontraron en ella siempre cobijo y cariño en aquella especie de comuna exótica y solidaria, en la que celebré varios Aberri Eguna, con un menú en el que, por no faltar, no faltaban ni los eskailus más parecidos a los de los ríos de mi niñez que nunca comí.

He sabido luego que se han ido muriendo bastantes de ellos. Algunos cuando tocaba, y otros, demasiado pronto, fuera de tiempo, antes de tiempo. Los Centro Vascos de Caracas y Valencia anuncian para dentro de unos días un Homenaje a los Vascos de Chirgua. Yo me acordaré un poco más de todos ellos y un poco más de entre todos ellos de Kontxa, que apareció un día en nuestra casa de la calle Beethoven de Bello Monte sin avisar, con regalos, con una enorme papaya, que en Venezuela es una lechoza enorme. Con el regalo más grande de todos: ella.

 

0 pensamientos sobre “El homenaje será en Chirgua: capital, Bedia

  1. Irantzu Leunda Biskarret

    Hola Jose Félix, no tengo que decirte e quien soy hija no??
    Estuve en Venezuela para el homenaje, tengo fotos publicadas y necesito tu mail para darte el enlace.
    Agur

  2. Sandra

    HOLA JOSE FÉLIX, A MI NO ME CONOCES SOY SANDRA ESPOSA DE BINGEN BARROETA.HIJO DE PANTXIQUE MEABE Y JUAN LUIS BARROETA.TE ESCRIBO DESDE CHIRGUA PARA COMENTARTE LO BONITO QUE ESTUVO EL HOMENAJE QUE LE HICIERON A LOS VASCOS DE CHIRGUA FUE UN ACTO MUY EMOTIVO, HUBO MUCHA ALEGRIA Y HASTA LAGRIMAS CON LAS PALABRAS TAN CONMOVEDORAS QUE MI CUÑADO JON BARROETA DIRIGIO A TODOS LOS PRESENTES.

    BUENO TE CUENTO AQUI SEGUIMOS, AHORA SE CAMBIERON LAS GALLINAS POR LOS POLLOS DE ENGORDE SIGUE HABIENDO PAPAS,TOMATES, PIMENTONES. Y OTROS NEGOCIOS MAS IMNOVADORES.

    CUANDO QUIERAS SABER ALGO DE CHIRGUA, Y DE TUS AMIGOS YA TIENES MI CORREO.

    SALUDOS.

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