Desde el pasado 18 de Sepetiembre se ecuentra abierta al público la exposición dedicada a Aljandro Magno. Más de 350 obras maestras procedentes del museo madre de San Petesburgo, entre las que figura el famoso camafeo Gozaga, rendirán tributo a Alejandro Magno, su viaje hacia el Este y la influencia del helenismo, abarcando casi 2.500 años de historia. Ningún otro rey de la antigüedad despierta tanto interés y se usa tantas veces como referente. Alejandro Magno (365-323 a. C.) fue hijo del Rey Filipo de Macedonia. En su juventud fue alumno de Aristóteles, quien ejerció gran influencia sobre él. A los veinte años sucedió a su padre asesinado y dos años después empezó la gran campaña militar que le dio tanto renombre. A través de sus conquistas entabló contacto con muchos países y culturas: Siria, Egipto, Bactriana e India. Fundó nuevas ciudades y su paso dejó huellas griegas en la arquitectura, el arte, el idioma y el modo de vida, un proceso que se conoce como helenismo.
La exposición del Hermitage Amsterdam hace un retrato del propio Alejandro y de los grandes cambios culturales y artísticos que siguieron a su conquista. +INFO
