Mercadillos navideños, pistas de patinaje sobre hielo, norias gigantes, fuegos artificiales… Los viajeros que se acerquen a Flandes durante el mes de diciembre tendrán la ocasión única de vivir una estancia de ensueño adentrándose en el auténtico espíritu de la Navidad.
La noche del 5 de diciembre es mágica para los niños flamencos. San Nicolás llega a sus casas cargado de regalos y dulces. Entre ellos siempre hay alguna mandarina, porque cuenta la leyenda que el santo llega en barco desde España. Y la tradición marca elaborar galletas caseras de especias y figuritas de mazapán.
Vuelve a Flandes por Navidad
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