El ascensor panorámico de Laguardia ha obligado a intervenir a los bomberos de Vitoria-Gasteiz en dos ocasiones este fin de semana, ya que se ha paralizado dos veces dejando personas encerradas en su interior.
La primera incidencia tuvo lugar a primera hora de la tarde del viernes, cuando el elevador, en el que iban dos personas, se quedó parado medio metro por debajo de la salida superior.
Los bomberos efectuaron el procedimiento de emergencia, pero el aparato no respondió, por lo que abrieron la puerta con la llave de ascensores y sacaron a las personas por el hueco que quedaba salvando el escalón, según han informado hoy en una nota.
El segundo incidente ocurrió ayer domingo sobre la una y media de la tarde. En esta ocasión el ascensor estaba por debajo de la planta superior y dejaba un hueco de unos 30 centímetros para poder liberar a las personas.
El elevador tampoco respondió a la maniobra de emergencia, por lo que los bomberos abrieron las puertas para que entrara algo de aire fresco tanto a la cabina como al hueco del ascensor.
Asimismo, dieron agua a las personas atrapadas para que se refrigeraran y les tranquilizaron mientras esperaban a que se enfriara toda la electrónica del ascensor.
Minutos después probaron de nuevo en modo emergencia y consiguieron subir el elevador hasta la planta superior y sacar así a las personas que llevaban casi una hora atrapadas en la cabina.
Más casos
Ésta no es la primera ocasión en la que los bomberos de Vitoria intervienen para rescatar personas encerradas dentro de este ascensor panorámico.
El pasado marzo el elevador se detuvo a 1,8 metros del suelo y sus trece ocupantes tuvieron que esperar cerca de una hora a que los bomberos pudieran descender la cabina y liberarlos.
Por ello los bomberos de Vitoria creen que “sería conveniente hablar con alguien del Ayuntamiento (de Laguardia) para que solucionen el problema definitivamente”.
Este ascensor panorámico fue inaugurado a finales de enero por el consejero de Justicia y Administración Pública, Josu Erkoreka, ya que los 600.000 euros que costó la obra fueron sufragados por el Ejecutivo de Vitoria.
Se trata de una infraestructura que favorece la movilidad de los vecinos de Laguardia que viven junto a la carretera A-124, ya que gracias al elevador y a la pasarela peatonal que lo comunica con la calle Barbacana el casco histórico les resulta ahora más accesible.