El párroco de Asteguieta (Vitoria) ha reclamado “igualdad” entre los barrios de la capital alavesa en los “deberes de acogida” de la familia Manzanares Cortés, conocida como los “pichis”, y “transparencia” en el proceso.
Vecinos de esta localidad, perteneciente al municipio de Vitoria, llevan desde finales del pasado año protestando contra la llegada de esta familia al lugar después de que Alokabide, la sociedad del Gobierno Vasco que gestiona el alquiler social, les haya adjudicado una vivienda en Asteguieta.
En un escrito remitido a los medios de comunicación, el párroco de esta localidad, José Ignacio Calleja, constata que si la familia Manzanares Cortés tiene reconocido el derecho subjetivo a una vivienda tiene que vivir en algún sitio en Vitoria, pero pide también que se “muestre con transparencia por qué toca” en Asteguieta.
“Alokabide tiene la obligación democrática de mostrárselo a la Junta Administrativa de este pueblo”, remarca el párroco, quien asegura que la “democracia no admite opacidad”.
También dice que la Alcaldía de Vitoria debe “mostrar” que “todos” los barrios y zonas de la ciudad están en la lista donde puede tocar la acogida, porque, en caso contrario, “no hay igualdad” entre ciudadanos.
“Sin transparencia en la asignación del piso e igualdad de los ciudadanos y barrios” la “democracia es elitista y se presta al abuso. Lógico que Asteguieta proteste”, reflexiona el cura, quien indica que él ha propuesto que por “humanidad” se acoja a esta familia ya “aunque no se den las condiciones dichas”.
Reconoce que sus vecinos se lo reprochan y dice que “comprende” que protesten hasta que no se aclaren las dos cuestiones: “transparencia en el proceso e igualdad en los deberes de acogida”.
Finalmente exige que la protesta vecinal se mantenga “en el nivel del derecho y la razón” y sin “prejuicios preventivos”.