Condenan al dueño de un perro peligroso que mordió a un hombre en Vitoria
Un hombre de 36 años ha sido condenado por un Juzgado de Vitoria a un año y dos meses de cárcel y al pago de una indemnización de 1.440 euros por haber azuzado a su perro de raza peligrosa contra el dueño de otro can a quien mordió en un brazo.
Según la sentencia dictada por el Juzgado de lo Penal número 2 de Vitoria, a la que ha tenido acceso Efe, los hechos ocurrieron el 23 de abril de 2015 cuando el acusado, nacido en Ecuador y en situación legal en España, discutió con el propietario de otro perro debido a las discrepancias que ambos mantenÃan sobre cómo debÃan llevar a sus respectivos animales.
El acusado tenÃa un perro de la raza American Staffodshire, considerado potencialmente peligroso, y sobre las 13.00 horas pasó junto al estanco que regentaba el hombre vÃctima de la agresión, quien a su vez era dueño de un perro labrador que solÃa estar atado fuera de la tienda.
El procesado, que llevaba atado a su perro peligroso pero sin bozal, comenzó a discutir con el dueño del otro perro y en el transcurso de la pelea azuzó a su can tirando de la correa de forma fuerte y seca para que mordiera al otro hombre, algo que logró ya que el American Staffodshire saltó contra el estanquero, de 42 años y le enganchó con los dientes en el antebrazo izquierdo.
La vÃctima, en “legÃtima defensa”, comenzó a bracear para soltar al perro y propinó un manotazo en la cara al dueño del perro peligroso, que cayó al suelo y logró que el can le soltara. A consecuencia del mordisco sufrió un desgarro en el antebrazo y un hematoma, tuvo tratamiento médico y tardó en curar 40 dÃas, sin que le quedaran secuelas.
Por el golpe y la caÃda al suelo, el hombre que habÃa azuzado al perro sufrió un hematoma en el pómulo derecho, contusiones en la mano, la muñeca y el costado derechos y tardó en curar tres dÃas.
La Sala considera que el acusado es autor de un delito de lesiones con uso de medio peligroso, ya que su perro es considerado como tal y tuvo la “intención de lesionar” al dueño del labrador, aunque como las lesiones causadas no fueron graves, rebaja a 1 año y 2 meses de prisión la pena de cárcel que pedÃan el fiscal -2 años y 6 meses- y la acusación particular -3 años-.
En cuanto a la falta de lesiones que habrÃa cometido el dueño del labrador al golpear y tirar al suelo al otro hombre, el Juzgado le absuelve al señalar que actuó en legÃtima defensa.
La sentencia rechaza por tanto la versión que dio el procesado, que aseguró que no azuzó a su perro y que este llevaba puesto un bozal, algo que ratificó su novia en el juicio, por lo que el juzgado pide que se deduzca testimonio ya que cree que lo declarado por ella fue falso y puede ser constitutivo de delito.