El pasado mes de marzo se cumplieron 8 años tras el fallecimiento de Jesús Rollán y, a lo largo del dÃa pensé en la importancia que tiene para un deportista la formación académica paralela al desarrollo fÃsico. Es un aspecto que ha salido a flote de manera más aguda desde que comenzó la crisis económica y sus posteriores consecuencias en el deporte. Unos estudios -si son superiores mejor- sirven como puente para unir la reinserción civil una vez alejado del circuito profesional.
En la última semana hemos visto publicado en varios medios el positivo que el futbolÃsta Dani BenÃtez ha dado por cocaÃna. Un jugador que las veces que ha dado que hablar ha sido, generalmente, por cuestiones ajenas a su calidad futbolÃstica. Supongamos que ha sido despedido de su club, probablemente sancionado con un par de años, sin poder vender su imagen ($), su patrimonio malgastado a lo largo de los años -muy aficionado al poker- y, me atrevo a decir que con unos estudios básicos, el futuro de este chaval se complica más por momentos.
El mensaje es claro, la educación y el deporte pueden y deben combinarse entre los jóvenes en un mundo cada vez más globalizado y competitivo. En España las facilidades que se les dan a los deportistas -no sólo de Alto Rendimiento, también los que disputan competiciones estatales a pesar de que sean amateurs- son bastante ‘justitas’. Las becas han ido disminuyendo los últimos cuatro años y, obligan a tomar una decisión que perjudica a todas las partes: Deportes o estudios.
Me gustarÃa señalar en las siguientes lÃneas algunos aspectos de la diferencia existente entre España y Estados Unidos en lo que se refiere al ámbito del deporte universitario y la educación. Más de 250 deportistas españoles se encuentran en Estados Unidos con una beca deportiva, entre ellas alguna relacionada con el waterpolo. Muchos se han dado cuenta de que el panorama está muy difÃcil para todos los jóvenes. Algunos han decidido priorizar unos estudios superiores combinándolo con el deporte profesional. Lamentablemente, por diferentes circunstancias, en España no se dan las condiciones. Bien es cierto que la universidad en Estados Unidos supera con creces el coste de la matricula que en España, pero la educación que se recibe es notoriamente más completa como lo pueden atestiguar las universidades americanas que se cuentan entre las mejores 200 universidades del mundo (España por el contrario no tiene ninguna en esa lista).
Primer aspecto. Presupuesto destinado para el deporte y becas. Un ejemplo concreto creo que va a ser más que suficiente para darnos cuenta de la diferencia que quiero exponer. La Universidad americana de Georgia destinó el pasado 2013 una partida de 70 millones de euros para 650 deportistas de entre 21 deportes. El Consejo Superior de Deportes español obtuvo un presupuesto en 2013 de 82 millones de euros que incluÃan partidas para las federaciones deportivas, planes de tutorización y orientación laboral y, subvenciones a las Comunidades Autónomas. Por si fuera poco, España destina sólo a la Liga Nacional de Fútbol Profesional 38 millones de euros. La Liga y los clubes manejan unas cantidades enormes de dinero que ya no pueden satisfacerse con dinero público. Que miren la NBA y las grandes ligas americanas. ¿Quieren dinero y espectáculo? Ahà lo tienen.
Segundo aspecto. Educación universitaria y deporte. En Estados Unidos las ligas universitarias son un trampolÃn perfecto para dar el salto a profesional y, en multitud de ocasiones, son los mismos deportistas que satisfacen la cantera americana. Además, la universidad pone a tu servicio los medios necesarios para poder compaginar estudios y deporte al más alto nivel. En España el deporte universitario no tiene relevancia social y el nivel es paupérrimo. Por si fuera poco los deportistas tienen muchos problemas para poder conciliar estudios y deporte. Una parte de los deportistas españoles, deciden no optar por una carrera, lo que les limita la salida laboral una vez acabada la carrera profesional.
Tercer aspecto. Instalaciones y medios. Todas las universidades americanas tienen unas instalaciones capacitadas para albergar cualquier deporte, por muy minoritario que sea. Viajes, entrenador y entrenamientos… una cobertura excelente para que el deportista solo se preocupe de competir. En España la crisis ha hecho que muchos deportistas tengan que costearse sus viajes, además de la ropa y otros menesteres. Las instalaciones son inexistentes en las universidades españolas. Sólo los Centros de Alto Rendimiento y unos pocos privilegiados pueden tener los medios óptimos para el perfeccionamiento de su nivel.
Cuarto aspecto. Salidas profesionales. En Estados Unidos el deporte tiene una relevancia importante por los valores que te ofrece y eso, en el mundo laboral, está reconocido. Además los años de estudio ahà permiten a los atletas conseguir un nivel excelente de inglés y, en un mundo globalizado como el que vivimos actualmente, tiene su peso a la hora de pujar por una plaza en una empresa. En España… qué os voy a contar. Con una tasa de paro juvenil dramática del 55% -lamentable- y por lo general sin un nivel bueno de inglés, la situación de los jóvenes deportistas aquà está estancada para los que tienen estudios y, para los atletas que no han podido compaginar estudios y deporte, la situación está al borde del precipicio.
Quinto aspecto. Reconocimiento social. Los deportistas estadounidenses obtienen un reconocimiento y prestigio social importante en sus universidades y fuera de ellas. Obviamente si juegas al basket o al fútbol americano tienes mayor reconocimiento, pero si juegas al lacrosse también lo tienes. En España o eres jugador de fútbol o lo tienes ‘jodido’. Si juegas al lacrosse aquà eres el bicho raro, seguro.
Se podrÃan enumerar más, pero son sólo algunas comparaciones de dos sistemas totalmente contrapuestos entre sÃ. Una forma de combinar deporte y estudios superiores que aquà no se puede dar hasta el momento y que, podrÃa ser una alternativa a tener en cuenta ante la maltrecha situación de muchos clubes. Para éstos últimos también la educación es una asignatura pendiente entre la cantera, porque a veces basta un entrenamiento o un partido para aprender valores que ni en un mes en centros de estudio.
El artÃculo puede tener diferentes lecturas
Como bien se comenta, las matrÃculas de las universidades de estados unidos están muy por encima de las del estado. Esto hace que la oportunidad de estudiar una carrera universitaria no esté al alcance de todos, cosa que aquÃ, más o menos sÃ.
También se destaca que los becados son deportistas de elite o los que tienen posibilidades de serlo. Según el artÃculo, parece ser que, las universidades sólo destinan la ayuda a los “buenos” y probablemente pensando más en el prestigio que le otorga a la universidad disponer de campeones, tal y como lo hacÃan en paises comunistas o paÃses del Este por ejemplo.
Por lo que entiendo que en Estados Unidos, si tienes dinero o eres muy bueno en lo que haces te va a ir bien, si no, que te coman los lobos.
No dejamos de hablar, de todas maneras, de un paÃs que tiene creo que más de 300 millones de habitantes, con el que no sé si podemos compararnos.
También se podrÃa hablar del por qué los estudios universitarios tienen tanta importancia y la formación profesional no (parece ser que en Europa la calidad de la formación profesional de Euskadi está muy reconocida; en cambio, nos empeñamos en estudiar una carrera universitaria, la cual cada vez tiene menos salida profesional), o por qué no se cambia el sistema y se crea un sistema más solidario y menos competitivo, …
Hay mucho de lo que hablar; es un tema interesante.
Un saludo, Ismael
Es un tema con mucha miga y muy interesante