De un tiempo a esta parte en las gradas de nuestras piscinas se ven alguna que otra escena lamentable.
Es responsabilidad de los clubes tomar parte en este asunto ya que normalmente el hijo o la hija de los susodichos están en la piscina, normalmente pasándolo bastante mal viendo al ‘padre’ perdiendo los papeles, aunque el ‘padre’ no lo piense ese hij@ no está disfrutando viéndole hacer el ridÃculo, insultado y metiéndose con árbitros, jugadores o entrenadores del equipo contrario (a vedes del propio equipo).