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Los mosaicos de Rávena: el Baptisterio de los Arrianos

Visión general de la decoración del Baptisterio. Puede observarse como las escenas del Bautismo y la procesión de los apóstoles tienen una orientación absolutamente opuesta.

Con un programa iconográfico muy similar al del Baptisterio Neoniano, se levantó en Rávena, durante el reinado de Teodorico el Grande, el Baptisterio de los Arrianos.

Ninguna fuente histórica nos habla de la construcción del edificio que debió tener lugar entre el final del siglo V y el principio del VI. Fue obra de Teodorico el Grande, como parte del conjunto catedralicio. Estaba situado al sudoeste de la fachada de la catedral arriana, originariamente bautizada como Hagia Anastasis (Santa Resurrección).

La primera referencia histórica acerca del edificio, proviene del obispo Agnello, que nos hace saber que, en su época, formaba parte de un monasterio dedicado a Santa María in Cosmedin.

Al igual que el Baptisterio Neoniano, la planta del Baptisterio de los Arrianos tiene forma octogonal. Pero, a diferencia del anterior, cuatro nichos se abrían en paredes opuestas, al este, oeste, norte y sur. Además, en origen, un ambulatorio cubierto, de casi dos metros de ancho, rodeaba el perímetro del edificio, dejando expuesto solamente el nicho situado al este.

De su decoración interior, que debió ocupar también las paredes, sólo se conservan los mosaicos de la cúpula. Su temática es similar a la del Baptisterio Neoniano. En la parte central aparece representado el Bautismo de Cristo, mientras un nivel por debajo, se observa una procesión de apóstoles que se encaminan hacia un trono central.

Puede verse en este detalle el eje establecido por las figuras del Espíritu Santo y Cristo. El río Jordán, a la izquierda, aparece personificado, según la tradición romana, como una figura barbada.

Sin embargo, se observan notables diferencias entre ambas representaciones. En primer lugar, el Bautismo de Cristo está orientado hacia el este, de tal forma, que sólo podía verse correctamente si uno se colocaba en la posición del obispo celebrante. Además, la escena aparece invertida con respecto a la que puede verse en el Baptisterio Neoniano. Las posiciones de San Juan Bautista y el río Jordán se han intercambiado y la figura de este último se ha agrandado. Ambos personajes aparecen barbados y marcan un fuerte contraste en relación a la imagen de Cristo, que ha sido representado como un joven imberbe. La figura de Cristo, con el Espíritu Santo sobre él, establece el eje central de la composición y su ombligo se convierte en el centro de todo el conjunto.

En el nivel inferior, una procesión compuesta de 12 apóstoles, se encamina hacia un trono sobre el que se alza una cruz enjoyada, cubierta por un palio púrpura. La escena está orientada de forma contraria a la de la cúpula, de tal manera que ha de verse de oeste a este. A diferencia de otras representaciones de Rávena, los apóstoles no aparecen aquí identificados. Sólo podemos distinguir, por sus atributos, a las figuras de San Pedro, sosteniendo las llaves, y San Pablo, que porta los rollos de la ley. Otro detalle que lo separa de la representación del Baptisterio Neoniano es el hecho de que aparecen sobre un fondo dorado, separados por esquematizaciones vegetales y coronados por halos. El de San Pedro blanco, el de San Pablo azul, como sucesor del primer Papa.

Se han realizado innumerables interpretaciones en relación a estos cambios en la decoración, en comparación con la del Baptisterio Neoniano. Se ha querido ver en las alteraciones algún tipo de conexión entre la iconografía y el culto arriano que difería del ortodoxo en la cuestión de la naturaleza de Cristo. Hay quien ha querido ver en su representación como un joven imberbe, la idea de la naturaleza inferior de Cristo con respecto a la de Dios Padre. Sin embargo, a pesar de la gran cantidad de teorías que se han generado alrededor del programa iconográfico del Baptisterio Arriano, sigue sin poder determinarse, de un modo concluyente, en qué forma la decoración del edificio plasmaba las creencias arrianas.

Itziar Martija: