X

Florencia. El Palazzo Medici-Riccardi

Nuestra primera parada será un notable edificio florentino. Nada menos que un palacio. El primer palacio urbano renacentista, de hecho. Es posible que muchos ya lo conozcan. Pero, desafortunadamente, suele ser mucho más frecuente que quien haya viajado a Florencia haya pasado, repetidamente, por delante de él sin tan siquiera fijarse. El Palacio Medici-Riccardi.

Como puede deducirse de su nombre, el palacio está indisolublemente unido a la más célebre y poderosa de las familias florentinas de la época, los Medici. La dinastía fue fundada por Cosme el Viejo (1389-1464), conocido como Pater Patriae, quien conjugó la fortuna familiar con una notable habilidad política, para convertirse en uno de los hombres más influyentes de su época.

Al igual que sus descendientes, Cosme fue un gran mecenas que supo aprovechar el genio artístico florentino para dejar pública constancia de su creciente poder. A tal efecto, en 1444, encargó a Michelozzo di Bartolomeo, más conocido como Michelozzo, la construcción de un palacio familiar en la vía Larga, que sentó las bases del nuevo estilo urbano del Renacimiento. El arquitecto combinó en el nuevo edificio la tradición palaciega florentina con el creciente interés por el pasado romano, para crear un modelo que sería largamente imitado.

Grabado de 1684 en el que se aprecia el Palacio Medici

A mediados del siglo XV, Florencia derogó las leyes que controlaban la expresión del poder personal a través de la arquitectura. Este cambio de política hizo posible que Cosme el Viejo y Michelozzo concibieran el nuevo Palacio como una metáfora del poder, la riqueza y la influencia política del primero.

Para que nos hagamos una idea clara del poder de los Medici, baste decir que fue necesaria la demolición de más de 20 casas para dejar espacio al palacio. En su interior contaba con más de 40 habitaciones, organizadas en torno a un patio central, y con una capilla privada para la familia. Este último detalle nos da una idea más clara de la influencia creciente de la familia. En 1422 Cosme el Viejo obtuvo una dispensa papal, de Martín V, para disponer de un altar portátil en su residencia. Lógicamente, en el palacio se proyectó una capilla que pudiese albergar el altar y potenciar su exclusividad frente al resto de familias florentinas. Como colofón, la capilla se hizo decorar con frescos de Benozzo Gozzoli y, hoy en día, son la principal atracción del edificio (pero de ella hablaremos en el siguiente post).

Vista general del palacio desde la esquina sur

Al exterior, el palacio de Michelozzo da la impresión de ser una gran mole de piedra, que, hasta puede recordarnos a otros notables edificios florentinos como el Palazzo Vecchio. Sin duda, rivaliza con él en tamaño y grandeza. Pero, si lo contemplamos atentamente, veremos las grandes diferencias que los separan. Michelozzo concibe este nuevo edificio en tres planos horizontales que van disminuyendo en altura, según se asciende y que se rematan con una cornisa absolutamente innovadora en la arquitectura florentina. Estos volúmenes horizontales se refuerzan visualmente por medio del trabajo almohadillado de la piedra. Los sillares, especialmente los de la planta baja, recuerdan a las antiguas murallas romanas y sabemos que Michelozzo los hizo retocar para que pareciesen antiguos.

La gran cantidad de ventanas que se abren en sus tres plantas, proporcionan una desacostumbrada cantidad de luz. Y, aunque, en algunos aspectos siguen la tradición local, añaden elementos puramente clásicos como las columnillas de capitel corintio que sirven de parteluz.

En su interior, todo quedaba organizado en torno a un patio porticado, decorado con relieves y esculturas de bulto redondo, posiblemente inspirado en las descripciones de las casas romanas, hechas por Vitrubio. Desde el patio se accedía a todas las estancias del palacio, las más importantes de las cuales estaban en la planta primera, considerada el piano nobile o planta noble del edificio. En él, una de las primeras estancias en completarse y decorarse fue la anteriormente mencionada capilla, conocida hoy día como la Capilla de los Reyes Magos.

Itziar Martija:

View Comments (1)