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John Everett Millais

El valle del descanso puede considerarse el último de los cuadros prerrafaelitas de Millais. Su influencia en el movimiento simbolista fue importante.

Muchos fueron los artistas que, en uno u otro momento, se adscribieron a los principios prerrafaelitas. Sin embargo, tres nombres destacan entre todos ellos, cada uno con un estilo propio e inconfundible, Sir John Everett Millais, William Holman Hunt y Dante Gabriel Rosetti.

John Everett Millais era uno de esos artistas que llevaba la pintura en la sangre. Desde pequeño tuvo una inmensa facilidad por el dibujo y, gracias a ello, le fue fácil acceder a la Royal Academy, algo fundamental para cualquiera que quisiese dedicarse al arte en la Inglaterra de la época. Precisamente allí, conocería a los dos compañeros que le acompañarían en su aventura prerrafaelita, a partir de 1848.

Su primera obra en el nuevo estilo, Isabel, estaba tomada de un poema de Keats, Isabel o la maceta de albahaca, sobre el que todos los miembros de la Hermandad realizaron un boceto. Para su ejecución, Millais se inspiró en los grabados de las pinturas del Camposanto de Pisa que tanto habían influido a los miembros de la Hermandad. Este ciclo de frescos, realizado por Benozzo Gozzoli, fue una de las influencias decisivas en las primeras pinturas de los prerrafaelitas, puesto que el estilo propio del primer Renacimiento italiano ofrecía a los pintores prerrafaelitas ese toque arcaizante que tanto les atraía.

Con esta pintura Millais comenzaría aplicar los principios prerrafaelitas a su obra, pero el cuadro que le consagraría sería Ofelia. De nuevo la representación de un tema literario, en este caso del Hamlet de Shakespeare. El tema, sin embargo, no parecía muy adecuado como motivo pictórico. La representación de una loca ahogada, parece, a primera vista, un asunto muy poco atractivo y absolutamente desprovisto de gracia. El tema ofrecía el reto de enfrentarse a la representación de la naturaleza que Ruskin consideraba el objetivo primordial de cualquier artista. Millais consiguió crear en el cuadro un poderoso y atractivo paisaje natural, pero Ruskin consideró que su representación, en especial el agua, no se ajustaba a lo que él teorizaba en sus Pintores modernos.

Con el distanciamiento de Ruskin, Millais fue, poco a poco, distanciándose también de la Hermandad Prerrafaelita. Paulatinamente, los temas fueron vaciándose de contenido. Los cuadros empezaron a ser meras imágenes bellas aunque algunas de sus últimas obras como pintor prerrafaelita se convertirían en importantes influencias del movimiento simbolista: Sir Isumbras en el vado, Hojas de otoño y El valle del descanso.

A los 28 años de edad Millais abandonó la Hermandad Prerrafaelita. Siguió siendo un artista de renombre en la Inglaterra de la época, aunque su pintura perdió la frescura de la juventud y la inquietud por la experimentación de su etapa anterior. En 1896, Millais fue elegido presidente de la Royal Academy. Murió pocos meses después.

Itziar Martija: