La Ertzaintza ha detenido a cuatro personas, dos en San Sebastián y dos en Errenteria, como presuntos autores del robo de diversas cantidades de dinero de cajeros automáticos que previamente habían manipulado para bloquear los billetes solicitados por los usuarios.
Uno de los arrestados en la capital guipuzcoana portaba una tarjeta de crédito de uno de los detenidos en Errenteria, por lo que la Policía vasca investiga su pertenencia a una organización “itinerante” especializada en este tipo de delitos, ya que se han detectado casos con el mismo “modus operandi” en distintas localidades de Bizkaia y Álava y en otras comunidades autónomas.
El sistema empleado para sustraer el dinero, denominado “cash trapping”, consiste en la colocación de una pletina metálica, adherida con pegamento, en la ranura del expendedor del cajero, de forma que los billetes quedan retenidos una vez que el cliente hace la operación, ha informado el departamento vasco de Interior.
Los ladrones suelen utilizar esta técnica en cajeros exteriores, porque les permite seguir los movimientos del cliente a distancia y actuar con rapidez, o actuar en horas en las que las entidades bancarias están cerradas al público para hacerlo “con mayor impunidad”.
El pasado viernes, agentes de la Ertzaintza establecieron un dispositivo de vigilancia en un cajero automático de San Sebastián en el que se había descubierto una manipulación y detuvieron “in fraganti” a dos varones cuando extraían la pletina metálica del dispensador de dinero, que tenía varios billetes adheridos y era similar a la retirada anteriormente por una patrulla en otra entidad bancaria donostiarra.
A los arrestados, de 21 y 19 años, se les ocupó además un envase de pegamento, así como la tarjeta de crédito a nombre de uno de los que fueron arrestados en Errenteria ese mismo día.
Fue la Policía Municipal de la localidad guipuzcoana la que detuvo a los dos varones, de 21 y 27 años, que habían puesto en práctica el mismo método en un cajero y a los que intervino varias pletinas de diferentes medidas, bandas adhesivas, tubos de pegamento y otras herramientas presuntamente utilizadas en la comisión del delito.
Del interior del expendedor retiraron una placa con restos de cola junto al dinero que había quedado “atrapado”, por lo que los agentes pusieron a ambos a disposición de la Policía vasca.
La Ertzaintza recomienda a los usuarios que revisen el dispensador de billetes del cajero antes de realizar cualquier operación y, en el caso de observar cualquier anomalía o de quedar retenido el dinero, que no abandonen el cajero y avisen a la sucursal o a la policía.