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“La Paloma de la Paz” de Basterretxea regresará a la Zurriola

La escultura “La Paloma de la Paz” de Néstor Basterretxea cambiará de ubicación en San Sebastián, a propuesta del alcalde, Juan Karlos Izagirre, con lo que abandonará el lugar que actualmente ocupa junto al estadio de Anoeta para regresar a su espacio original frente a la Zurriola.

Según ha informado hoy el consistorio donostiarra en un comunicado, el primer edil ha realizado esta propuesta tanto en la Comisión municipal de Derechos Humanos como en la Junta de Portavoces con motivo de la conmemoración el 10 de diciembre del Día Internacional de los Derechos Humanos.

La misma fuente ha indicado que, de esta manera, “la escultura, de profundo significado, volverá a colocarse frente al mar, tal y como deseaba el propio artista y con el acuerdo de la familia y las fuerzas políticas”.

La obra de Basterretxra completará, junto con las grandes obras de Jorge Oteiza y Eduardo Chillida, el grupo de trabajos escultóricos situados delante del mar en San Sebastián.

No obstante, ésta no será la primera vez que “La Paloma de la Paz” se sitúa frente al litoral ya que, de hecho, fue inaugurada el 21 de diciembre de 1988 en el paseo de la Zurriola.

Pocos años después, cuando comenzaron las obras del Kursaal, fue trasladada a Amara de manera provisional y el propio Basterretxea admitió el cambio bajo la condición de que regresara a un punto situado delante del mar.

El Ayuntamiento entiende que colocarla en la zona de Sagüés, por lo tanto, “saldará la deuda que existía hacia la memoria del artista”.

Izagirre ha señalado que “La Paloma de la Paz” es una “obra realizada contra las violencias y a favor de la paz” y de “la palabra”.

El primer edil ha dicho que, cuando se cumplen cuatro meses desde la muerte de Néstor Basterretxea, deseaba anunciar que “su ‘Paloma de la Paz’ quedará otra vez mirando al mar y transmitirá el mensaje de la obra a favor de la convivencia y la paz”.

“Esto nos recordará, de cara al futuro, que la paz necesita la participación de todos y nos ayudará, desde el optimismo, a mirar al futuro de Donostia y de Euskal Herria con esperanza”, ha agregado.

Técnicos del Ayuntamiento de San Sebastián trabajan en estos momentos para delimitar la ubicación exacta de la obra en la zona de Sagüés.

No obstante, a consecuencia de las tareas requeridas en la adecuación del entorno y el propio traslado de esta escultura de grandes dimensiones es posible que no pueda ser trasladada antes de la tercera semana de diciembre.

Fuentes municipales han indicado que todavía no se ha decidido qué se colocara en la rotonda de Amara en la que está actualmente la obra.

EFE:
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