La torre de la catedral del Buen Pastor de San Sebastián iniciará previsiblemente el próximo verano sus trabajos de restauración con un presupuesto de 1,5 millones, de los cuales 835.000 euros serán financiados por la Administración central, unas obras que permitirán que pueda ser visitada.
El templo de la capital guipuzcoana, junto con la portada de Santa Ana de la catedral de Vitoria, a la que se han adjudicado 326.500 euros, son los dos proyectos seleccionados este año en Euskadi por la Comisión Mixta del 1,5 % Cultural integrada por los Ministerios de Fomento y de Cultura.
Por este motivo, el delegado del Gobierno en el País Vasco, Javier de Andrés, ha visitado hoy la catedral acompañado del obispo de la diócesis donostiarra, José Ignacio Munilla.
El prelado ha explicado que hoy es un día de “alegría” porque se visualiza un acuerdo por el que ha recibido la ayuda de 835.000 euros, un aporte que evidencia la “sensibilidad” que ha existido para ayudar a un templo que, aunque no es gótico sino neogótico, tiene “una gran belleza y se ha convertido en emblemático” de la ciudad.
“Ahora el reto” es conseguir los 835.000 euros restantes, para lo cual Munilla ha hecho un llamamiento a “todos los guipuzcoanos” para que se pueda llevar a cabo la intervención en la torre y ponerla “al servicio del pueblo creyente y de los amantes del patrimonio cultural”.
La diócesis está “volcada” en la tarea de obtener esa suma y ha iniciado “contactos personales” para intentar completar el 1,5 millón de euros, ha indicado.
Uno de los objetivos de la iniciativa es abrir la torre a las visitas, que según ha señalado Munilla “serán gratis”.
En la basílica de Santa María los visitantes deben pagar una entrada porque de esta manera la diócesis “hace frente a las cuotas del crédito bancario que tuvo que solicitar para sufragar las obras realizadas”, ha indicado.
De Andrés ha resaltado que la rehabilitación de la torre será una “gran oportunidad” para la diócesis y ha subrayado que la iglesia del Buen Pastor es un “icono vasco” y una de las “imágenes más populares” de San Sebastián.
“Reúne todos los requisitos para obtener el 1,5 % cultural”, ha señalado De Andrés que ha aludido al éxito obtenido por la fórmula “abierto por obras” en la catedral de Santa María de Vitoria.
La posibilidad de que se pueda visitar la torre mientras se ejecutan las obras en la torre donostiarra “está abierta”, aunque es “complicado” por motivos de seguridad al ser un espacio “muy cerrado”, ha señalado la arquitecta Uzuri Larrañaga, miembro del estudio Zetabi Arkitektura que ha redactado el proyecto de restauración.
Construida en piedra arenisca procedente de Igeldo y con 75 metros en forma de aguja, la torre requiere de una restauración tras más de 120 años de historia (fue inaugurada en 1897) porque al ser uno de los elementos más expuestos a las condiciones meteorológicas ha sufrido “muchos daños”, ha indicado.
En primer lugar, se llevará a cabo el montaje del andamio para poder acceder a toda la torre y posteriormente se procederá a los estudios para analizar la piedra original y los morteros que se colocaron posteriormente.
Una intervención llevada a cabo en los años 70 instaló un revoco exterior que no deja transpirar a la arenisca, con lo cual está “se ha ido desgastando, por lo que el recubrimiento queda como una máscara que está a punto de desprenderse y, de hecho, algunos fragmentos han caído sobre la plaza”, ha indicado.