El Ayuntamiento de San Sebastián sacará a concurso por 333.000 euros los trabajos de retirada de piedras en la playa Ondarreta para los dos próximos años, con lo que continuará los trabajos iniciados en 2015 para garantizar el disfrute de los bañistas en verano.
Ésta es una actuación “a largo plazo” debido al “gran volumen” de piedras que acumula el arenal donostiarra, desde al menos 4 metros de profundidad, ha explicado el alcalde, Eneko Goia, en una rueda de prensa tras la Junta de Gobierno Local.
En su reunión de hoy, el ejecutivo municipal ha aprobado iniciar el expediente para la contratación de ese servicio, dividido en dos lotes, uno para quitar propiamente las piedras, valorizarlas y suministrar la maquinaria necesaria, y otro para la toma de datos sobre los áridos recogidos.
El contrato saldrá a licitación con una duración inicial de dos años, prorrogable anualmente por dos más.
Sobre las playas donostiarras, el Gobierno ha aprobado además hoy también la primera prórroga del contrato con la Cruz Roja para la vigilancia, salvamento y asistencia, entre junio de 2018 y mayo de 2019, en los arenales y la isla, así como para el baño asistido para discapacitados en La Concha, por un importe cercano a los 440.000 euros.
Los contratos para la explotación de los dos bares del voladizo de esa playa también han sido prorrogados, por tercera y última vez, en la Junta de Gobierno de esta mañana, que ha acordado asimismo ampliar el de alquiler de piraguas en Ondarreta.
En cuanto a las subvenciones destinadas a entidades privadas sin ánimo de lucro, para proyectos y actividades en distintos ámbitos, el ejecutivo municipal ha aprobado las bases generales de la convocatoria de 2018, a la que destinará 1,6 millones de euros.
El alcalde ha informado por otra parte de que el gobierno donostiarra ha dado hoy luz verde a la ejecución del proyecto de redistribución del espacio interior y de los actuales puestos de trabajo en el Palacio Goikoa, para lo que ha asignado 340.000 euros.
Según ha explicado, esta actuación, que servirá para trasladar a ese edificio todo el área financiera del Ayuntamiento, forma parte del nuevo plan de sedes y reorganización de servicios municipales que lleva a cabo el actual ejecutivo.
Goia ha dicho que se trata de un plan muy ambicioso, cuyo coste podría rondar los 10 millones de euros, que se irá haciendo poco a poco y que, en principio, se fija como objetivo dejar al final de la actual legislatura “terminada o al menos iniciada” la nueva ubicación de la oficina municipal de turismo en la Casa Consistorial.
Entre los “grandes movimientos” previstos, ha mencionado que en el edificio de la calle Easo donde estuvo la sede de Donostia 2016 se prevé ubicar Udalinfo y el resto de servicios de atención ciudadana, entre otros departamentos.