El barrio de Altza de San Sebastián dispondrá de unas instalaciones deportivas provisionales hasta que se construya el nuevo polideportivo, gracias la cesión temporal del antiguo Instituto de la Construcción por parte de la Fundación Kutxa, que podría convertirse en definitiva y pasar a ser de titularidad municipal.
El acuerdo de cesión gratuita por cuatro años para utilizar el complejo de edificios en desuso que albergaron el antiguo centro formativo, ha sido presentado hoy “in situ” por el alcalde donostiarra, Eneko Goia, el concejal de Deportes, Martín Ibabe, y el presidente y el director general de Kutxa Fundazioa, Manuel Beraza y Carlos Ruiz, respectivamente.
Goia ha agradecido “la colaboración” de esta entidad en la resolución del problema de falta de infraestructuras deportivas en Altza y ha anunciado que, además, mantienen “conversaciones” que, si prosperan, será “muy probable” que esos edificios, situados en pleno corazón de Altza, “queden definitivamente en manos del Ayuntamiento” para acoger “otro tipo de proyectos”.
Aunque el convenio de cesión temporal ya suscrito abarca todas las instalaciones y espacios del viejo instituto, el equipamiento deportivo provisional sólo utilizará la planta baja de uno de los inmuebles, cuyas obras de acondicionamiento ya han sido licitadas con un presupuesto de algo más de 1,5 millones de euros y un plazo de ejecución de casi seis meses.
Manuel Beraza se ha mostrado satisfecho por la colaboración de Kutxa con el Ayuntamiento en favor de los donostiarras y ha asegurado que la entidad “no ha tenido ninguna duda en aportar” sus edificios del antiguo instituto porque, realmente, era “triste” tener las instalaciones vacías “inútilmente” cuando existía una necesidad.
El alcalde ha dicho que la instalación deportiva provisional estará en servicio hacia finales de este año, lo que ayudará a los altzatarras a “soportar mejor el tiempo que queda hasta tener el polideportivo definitivo”, no antes del final de 2020, y también a “aligerar” la sobrecarga de usuarios que tienen los polideportivos municipales de barrios cercanos como Bidebieta e Intxaurrondo.
Mientras tanto, sigue avanzando “el complicado proceso” que ha acarreado la construcción de la infraestructura deportiva definitiva de Altza, ha comentado Goia, en alusión a las dificultades y retrasos generados tras detectarse contaminación por amianto en algunas de las parcelas implicadas en el proyecto.
Ha confirmado en ese sentido que la licitación está en marcha, en dos lotes con un presupuesto total de 17,8 millones, y ha precisado que los primeros trabajos de excavación comenzarán previsiblemente dentro del primer semestre de este año.
El equipamiento provisional ocupará unos 930 metros cuadrados en una planta baja, donde serán acondicionado un gimnasio “cardio”, otro de musculación, una sala “ciclo indor” y otra destinada a cursillos, además de aseos y vestuarios.