El puente de Astiñene, que une los barrios donostiarras de Egia y Loiola, se abrirá previsiblemente a todo tipo de tráficos el próximo miércoles, tras varios meses cerrado para reforzar su estructura, ha informado el Ayuntamiento de San Sebastián.
Según esta fuente, el puente permanecerá completamente cerrado hoy para realizar una prueba de carga y mañana para asfaltar su calzada si las condiciones meteorológicas lo permiten.
En caso de que la lluvia no permita llevar a cabo esta operación, la apertura al tráfico rodado se retrasaría, aunque sería factible reabrir el miércoles la infraestructura al paso peatonal.
Las obras de recuperación de Astiñene se han desarrollado en dos fases, la primera de las cuales posibilitó, a finales del año pasado, reabrir el puente al paso de peatones, bicis y motos, después de haber estado completamente cerrado durante unos cuatro meses al detectarse fisuras y problemas en su estructura.
La segunda parte que ahora concluye ha consistido en reforzar con micropilotes metálicos las pilas del puente para garantizar su estabilidad.
Cuando concluyan las obras, el Ayuntamiento habrá gastado un total cercano a los 800.000 euros en restablecer la funcionalidad del deteriorado puente sobre el río Urumea hasta que en 2020 entre en servicio el nuevo, cuyo proyecto de ejecución aprobó el pasado 9 de enero.