El Hospital de Eibar destinará una de sus plantas a albergar dos unidades residenciales sociosanitarias, que estarán gestionadas por la Diputación de Gipuzkoa, para atender a pacientes con problemas de salud y necesitados de servicios sociales.
La portavoz de la institución foral, Eider Mendoza, ha informado este martes en una rueda de prensa en San Sebastián de los acuerdos adoptados por el Consejo de Gobierno Foral, que ha aprobado la concesión por parte de Osakidetza de este espacio de 3.000 metros cuadrados.
Este tipo de unidades suelen ofrecer un espacio de transición para pacientes cuya convalecencia no pueda realizarse en su domicilio o en una residencia debido a que sufren limitaciones funcionales o se encuentran en una situación de exclusión social y que precisan una atención sanitaria y social simultánea, coordinada y estable.
Mendoza ha explicado que se trata de la primera unidad de estas características que se pone en marcha en un centro hospitalario del País Vasco y ha precisado que la Diputación de Gipuzkoa invertirá 3,1 millones de euros en su acondicionamiento.
Las dos unidades residenciales ofrecerán un total de 48 plazas, que se sumarán a las 100 que ofrece la Diputación de Gipuzkoa, 73 de ellas en el hospital de Cruz Roja en la calle Matia de San Sebastián y 27 en la residencia Argixao de Zumarraga.
Mendoza ha explicado que, tras la aprobación de la concesión, actualmente se trabaja en la elaboración de los pliegos para sacar a licitación a finales de año la gestión de estas unidades, que se prevé que estén operativas en verano de 2020.
Por otra parte, el Consejo de Gobierno también ha aprobado en su sesión de este martes incrementar en 500.000 euros, es decir, hasta los 3 millones de euros las ayudas a inversiones en explotaciones agrarias y desarrollo del medio rural.
El aumento de estas ayudas responde al número de solicitudes aprobadas, un total de 142, que ha superado el gasto inicialmente autorizado en esta línea de subvenciones en la que tienen cabida proyectos relacionadas con la seguridad alimentaria, la mejora de la higiene y el bienestar de los animales o la adaptación de la producción a las necesidades del mercado.